la sangre llama

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Las calles no estaban tan llenas de gente como en otras  ocasiones y sin darse cuenta ya había terminado su periodo, así que mattew se decidió a caminar en dirección a la plaza mas cercana tras despertar con una ansiedad enorme por comer chocolate, pero aun no estaba seguro de que tipo de chocolate, sin embargo tenia algo de dinero ahorrado y la tarjeta de crédito que su padre jack le había dejado por cualquier tipo de urgencia, asi que sin mas se vistió y mientras entraba a la plaza sintió como si alguien lo siguiera pero al voltear no veía absolutamente nada ni nadie, suspiro cansado y se decidió a continuar su camino de repente un olor a chocolate lo hizo delirar y soltar un jadeo de placer que no paso desapercibido de un grupo de chicos que lo observaron sobre todo un rubio de cabello rizado que mattew noto lo observaba con mas insistencia pero sin llegar a incomodarlo en un segundo sus miradas se encontraron y ambos sonrieron, mattew se sonrojo y camino directo a la tienda desde donde percibió el aroma del chocolate sin dudarlo preguntó el precio y quedo un poco sorprendido por el costo aunque lo disimulo muy bien, dio una mirada mas a el exhibidor y se decidió por un conejo de chocolate pero al pagar el cajero le guiño un ojo y en lugar de cobrarle le dio la bolsita con un conejo y una trufa de las que había preguntado al principio, se sonrojo. Pero insistió en pagar a lo cual el castaño sonrio.

- tal vez tu número y una ida a el cine sirvan para  pagar - el chico le guiño el ojo y le extendió un trozo de papel y una pluma, por un minuto lo medito y recordó que su padre lo había entrenado para defenderse así que anoto su numero y su nombre.

- gracias mattew, soy connor y solo estoy aquí por vacaciones así que .... Te llamo mas tarde

- si, esta bien gracias connor esperó esto no sea un problema - el pelirrojo levanto la bolsita mientras sonreía.

- para nada lindo esta tienda es de mi abuela y yo estoy aqui porque me aburro en casa, así que solo disfruta la trufa

Ambos sonrieron y mattew salio casi chocando con el rubio de cabello rizado que le guiño un ojo al estar cerca. Acto que el respondió con un sonrojo y una sonrisa para después salir casi corriendo.

Que estaba pasando es así como se siente ser un doncel maduró? Afortunadamente hasta ahora se había encontrado solo con chicos unos años mas grandes que el, todo estaba tan extraño para el después de ser ignorado muchos años, sin mas levanto los hombros y saco la trufa de la bolsa y se la metió a la boca, si los orgasmos cerebrales existían como decían esos vídeos de ASMR que karen veía definitivamente el experimento uno en ese momento. Ignorando las personas a su alrededor siguió caminando sin rumbo hasta llegar a una tienda de ropa para bebé de forma mecánica entro y camino hasta el fondo donde se encontró con pequeñas prendas para niño y de forma automática y sin parpadear tomo un mameluco de gatito de color negro lo abrazo contra su pecho y pozo una mano en su vientre y sintió calor, un calor en su vientre y en su corazón mientras cerraba sus ojos y lo vio. Era la imagen clara de lucifer que le sonreía mientras abría sus brazos para el y justo fue sorprendido por una vendedora.

- necesita ayuda? Ese es un mameluco muy hermoso, la tela es fresca y calientita y de momento tiene descuento ..

- si, me lo llevo - las palabras salieron de la nada y extendiendo la prenda sonrió y saco su tarjeta que le entrego a la vendedora la cual sonrio y lo acompaño a la caja donde le cobro y coloco la prenda en una bolsita de tela color azúl.

- por cierto por apertura de la tienda este pequeño obsequio es cortesía - la joven coloco una bolsita con un pequeño pañal, un babero y un par de calcetitas pequeñas - aqui tiene y gracias por su compra también hacemos entregas por si necesita algo para su bebé y no quiere salir, le colocare la tarjeta aqui - después de recibir la bolsa mattew camino en dirección a la salida de la plaza.

Una mano se posó en su hombro sobre saltandolo y sin mas dirigió un golpe a la persona que lo toco que reacciono esquivando el golpe y deteniendo su muñeca sin lastimarlo.

Ojos azules y café claro se miraron por largos minutos hasta que el rubio hablo.

- mala idea cierto? - ambos sonrieron y se alejaron un poco.

Mattew volvió a mirar a el chico rubio de cabello rizado que le extendió una caja de chocolates, justo las trufas que lo habían vuelto loco.

- soy danni rand y lamento haberte asustado, también seguirte y obligar a el cajero a decirme cual era el chocolate que te había gustado.

Mattew soltó una carcajada y se sonrojo al notar que todos los veían sobre todo unas chicas que incluso tomaron fotos, danni se percato y tomo la mano de mattew y lo saco de la plaza para llevarlo directamente a el estacionamiento donde una limusina esperaba a el rubio.

- te puedo llevar a casa??

- mattew, soy mattew y bueno creo que no quiero ser una molestia yo puedo caminar y bueno  casi te golpeo y esto - con un sonrojo levanto la caja de chocolates y sin darse cuentan abrazo la bolsa con la ropa de bebé, gesto que enternecio a danni que le extendió la mano mientras lo miraba fijamente, mattew la tomó y subió a la limusina, después de unos minutos llegaron y danni bajo para abrirle la puerta y lo ayudo a bajar cuando estuvieron frente a la puerta de la casa mattew sonrio.

- gracias danni, yo vivo aqui y ... Bueno

- puedo pedir tu número y redes sociales o prefieres que las investigue?

- puedes prestarme tu teléfono? - el rubio se lo extendió mientras mattew anotaba su numero y se auto enviaba una solicitud en instagram - listo gracias - se despidió de mano y entro a la casa con una gran sonrisa esperando ver a alguien pero se sorprendió de estar solo aun suspirando desbloqueo su teléfono y acepto la solicitud de danni rand.

Camino directo a la cocina donde vio una nota de su padre que decía había ido por la cena y junto a esta el correo junto a la revista que su padre recibía cada mes y que por primera vez tomo en sus manos ahogando un grito al ver la portada.

- no puede ser

Tras graduarse Daniel Rand toma las riendas de  Rand industries

Tras graduarse Daniel Rand toma las riendas de  Rand industries

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