Un Cambio

Una Dama

Elroy aún miraba a Candy sin decir nada, analizaba lo que le había dicho.

Candy ya se estaba sintiento un tanto incomoda por el silencio, por lo que se disponía a hablarle. Si la Tía Abuela no deseaba ayudarla entonces no la molestaría más, por que en cierto modo, daba miedo la seriedad de la Tía.

-Candice - habló la mayor, pero sin dejar espacio para más continuó, con la atención de Candy en ella - Mañana levántate temprano.

Elroy aun no se comprendía asi misma por lo que hacía, pero algo le decía que era lo correcto ya que después de todo, ser una Andrew trae muchas responsabilidades y a pesar de que ella era adoptada, llevaba en sus hombros el peso del apellido.

- Gracias Tía Abuela - Candy lo dijo en voz alta y muy emocionada, pero la mirada reprensora de la Tía Abuela, la hizo encogerse para calmarse y salir del despacho despues de un "puedes irte" por parte de la señora.

Tras cerrar la puerta Candy empezo a correr para encontrarse con sus ahora primos adoptivos, a quienes les contó lo sucedido.

Ellos al oírla primero se preocuparon, diciendole que la Tía era muy estricta, pero después se alegraron apoyandola y Candy solo dijo "Haré mi mejor esfuerzo".

Después de divertirse en el Jardín que Anthony cuidaba, los hermanos se marcharon del lugar por un invento de Stear que necesitaba varias manos, dejando a una Candy y Anthony solos, a pesar de la renuencia de Archie.

- Parece que te gustan mucho las rosas.

Anthony al oírla, solo sonrió suavemente.

- Si, lo hago en lugar de mi madre, cuando ella vivía las cuidaba personalmente, este lugar me trae muchos buenos recuerdos.

Anthony denoto cierta melancolía que notó Candy.

- Es hermoso, el hecho de que a pesar del tiempo las personas siguen viviendo en nuestro corazon.

Anthony se sorprendió y solo atinó a mirar a Candy tocando las rosas con delicadeza, cosa que hizo que el joven se prendara aún más de ella, ya que la escena ante él y las palabras dichas le resultaban sencillamente "Bello".

...

Archie y Stear iban llegando con el nuevo invento, y la escena frente a ellos le resulto incómodo, mucho más a Archie que por poco suelta lo que llevaba en las manos siendo reprendido por Stear.

...

Se juntaron todos en una pequeña pradera cerca de la mansión, ya que no querían explosiones riesgosas.

Candy ya se habia acostumbrado a esto, pero no importaba cuanto se acostumbrara, ella siempre se ponía tras Archie que era el único que la hacía sentir tan segura.

A Archie siempre le gustaba esa reacción, aunque esta vez tenía la molestia de lo sicedido anteriormente, pero sabía que lo hablarían mas tarde en su lugar secreto. Lugar al que nunca faltaban.

Archie pensaba en esto cuando una explosión lo hizo volver en si.

- Stear ten más cuidado - reprendía Archie.

- Lo siento - decía entre risas Stear, levantando su brazo y poniendo su mano tras su cabeza.

- La próxima vez asegurate de que funcione - Anthony expreso.

- De seguro que funcionará, Stear es un gran inventor - dijo Candy con firmeza.

- No le digas eso Candy, o pronto traera más de sus locuras - dijo Anthony.

Pero Stear emocionado dijo - Candy es muy amable, por lo que de ahora en adelante te concedere el honor de ser el sujeto de pruebas de este gran inventor - Stear levanto su mano derecha y luego su dedo índice, mostrando su idea a los presentes.