Al cabo de unos días, Rita salió con sus hijas al mall, claro que iba acompañada, de Lily, Lisa y Lana, ya que Lola decía ser una mujer sumamente ocupada, por lo que no era necesario que las acompañara. Era obvio que ella esperara que le "rogaran" para que las acompañara, sin embargo, en su lugar un simple suspiro de cansancio se escuchó y salieron de la casa, dejando a Lola con la boca abierta, la habían ignorado y eso no lo podía permitir y antes de poder reclamar, Rita se fue con las ya mencionadas a toda velocidad.
La amenaza rosa estaba muy indignada, pero podía aprovechar esa oportunidad para echar andar su plan de recuperar a su sirviente. – je, esto será tan gratificante, recuperar a mi sirviente y finalmente regresar a la normalidad, espero que no hayas olvidado tus modales Linkinton, de lo contrario tendré que re diciplinarte – dijo Lola mientras sacaba un celular de su osito de peluche.
Por su parte, Rita le contaba con gran emoción a sus hijas, sobre Lincoln, se notaba su gran felicidad cada que mencionaba como su relación iba creciendo, si bien, aun no estaba todo perdonado y aun Lincoln no le daba la mano completa, ella sentía que era un gran avance que lo viera sonreír cuando le contaba cosas sobre Lisa y Lily.
- no te preocupes Lana, Lincoln aun no me cree que tú has cambiado, pero es cuestión de que me permita llevarlas al café créanme su hermano ha cambiado mucho en este tiempo. No te desanimes querida – dijo Rita mientras acariciaba la cabellera de Lana, ya que la pequeña rubia estaba muy triste.
Lincoln hablaba con su madre cada que iba a verlo y formalmente le presento a Haiku, al principio las cosas eran tensas, ya que como ella imagino, le conto sobre lo que le sucedió, pero al cabo de unas horas hablando con ella y analizando su aura espiritual, Haiku comprobó que Rita no mentía, sin embargo, confiar ciegamente es algo que no harían.
Rita hablaba con Lincoln sobre sus hermanas, trato de ponerlo al tanto de lo que ha ocurrido en el tiempo que no ha estado. Primeramente, inicio con sus planes de divorcio, además de comentarle lo que hizo LJ en el concurso de selección para los juegos olímpicos. Lincoln ya lo sabía, pero prefirió que su madre le explicara. Y tal como espero, Lynn senior y Lynn Jr. Llegaron difamando y completamente enardecidos con Rebecca Rains. Rita se encerró en su habitación, junto con Lily, para evitar escuchar tantas quejas, Lisa y Lana prefirieron encerrarse e ignorar a su padre y hermana, sería difícil, pero tenían que intentarlo.
Lo peor fue cuando se volvió tema recurrente de discusión entre Lynn senior y LJ, las cosas pararon hasta que Lola exploto en furia para decirles que se callaran con respecto a ese tema, pero, como era de esperarse, Lynn senior le dijo que no interrumpiera a su hermana, que era mejor buscar la forma de descubrir que trampas había hecho la pelirroja Rains para vencer a Lynn.
Haiku pensó y expresó que era mejor pasar a otro asunto que no estuviera relacionado con LJ, cosa que Rita comprendio y procedió a contarle de Lana y su cambio con respecto a lo sucedido. Lincoln no lo creyó, ya que si bien, no lo hirió directamente, el dejar que sus animales estuviesen libres, afectaba de sobre manera a Lincoln, cuando trataban de atacarlo, no era culpa de los animales, en esencia eran salvajes, no se les podía culpar por seguir sus instintos, pero como Lana los dejaba salir a explorar de vez en cuando, las cosas se ponían complicadas.
Rita buscaba la forma en que pudiera darle la oportunidad de que su hija lo viera y también se disculpara, claro que no sería algo sencillo, sin embargo, no se rendiría fácilmente.
Lisa escuchaba como su hermano se iba desarrollando en un ámbito laboral y eso la llenaba de una sensación reconfortante que no lograba entender del todo, pero al escuchar que Lincoln dejo sus estudios, la preocupo bastante, no quería que su hermano se quedase sin tener los debidos estudios. – madre, la próxima vez que vayas a ese mencionado café ¿puedo acompañarte? Me gustaría poder ver a Lincoln y darle una reprimenda por no llevar sus estudios adecuadamente. – dijo ella con severidad, causando la risa, de su madre y la de sus hermanas, pocas veces veían que se comportara de ese modo, tiernamente seria.

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Camino a la Redención
AcciónLuego de dos años de maltrato hacia Lincoln debido a variados eventos ocurridos en su vida, él decide que no está dispuesto a seguir en las mismas condiciones, por lo que, con ayuda de cinco de sus hermanas, escapa de casa para iniciar una nueva vid...