I'll Follow The Sun

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Día 7

Tema: Girasol

Shipp: Dealor (John Deacon x Roger Taylor)

Etiquetas: FLUFF

Helianthus annuus, planta cultivada con fines oleaginosos, alimenticios y ornamentales. Él como biólogo la conoce por su nombre científico. El mundo la conoce como girasol, o mirasol. Su flor durante su etapa de maduración, persigue al sol. Al acabar de madurar, se mantiene fija. Ya no lo persigue, ya obtuvo lo necesario de él.

One day you'll look to see I've gone, for tomorrow may rain so, I'll follow the sun.

Canturreó en un susurro. Cada vez que regaba esa planta en su ventana, recordaba esos versos. Oyó pasos detrás de él. No sólo lo reconoció porque era la única persona en el departamento además de él, sino porque era capaz de reconocerlo en donde fuera. Su sol. Y como si sus extremidades fueran gobernadas por las actitudes de la planta que cuidaba, volteó hacia él.

Una sonrisa boba se dibujó en sus labios al ver el semblante aún a medio despertar de John.

—Buen día.

Como respuesta, recibió las mismas palabras acompañadas de un bostezo y la voz adormilada del castaño. Se acercó a la ventana junto al rubio y lo abrazó.

—¿Les estabas cantando a las flores o aún estoy muy dormido y lo imaginé?

—No les estaba cantando a las flores, estaba cantando. Sólo cantando.

—Sigue entonces, adoro esa canción.— El menor se acurrucó recargando su cabeza en el hombro de su pareja.

Someday you'll know I was the one, but tomorrow may rain so, I'll follow the sun.

And now the time has come and so, my love, I must go. And though I lose a friend, in the end you will know.

Someday you'll find that I have gone. But tomorrow may rain so, I'll follow the sun.

La suavidad que transmitía la voz ronca de Roger cantando a ese bajo volumen lo hizo sonreír. El mayor lo tomó de la mano y lo dirigió a la mesa para servir el desayuno.

—¿Sabes por qué cuido tanto de los girasoles?— Preguntó el rubio luego de un rato, dejando su taza de té sobre la mesa. El castaño negó.— Porque me veo reflejado en ellos. Se voltean para mirar al sol, y una vez que maduran, permanecen mirando al oriente,— tomó la mano de su novio.— Tú eres mi sol, ¿sabes? Y podría mirarte todo el día sin aburrirme.

Acarició su cabello, que se encontraba corto desde hacía unas semanas. Le había dicho que con un empleo tan serio como el que tenía, no podía presentarse con el cabello llegándole a la cintura. John sonreía enternecido por aquellas palabras y el verde de sus ojos se cubrió de un ligero brillo.

—Y no creo madurar pronto, así que no podré dejar de verte.

—Rog...— Deacon ladeó la cabeza hacia la mano del mayor que ahora acariciaba una de sus mejillas.

—Te amo, Deaky.

—Y yo a ti.

El rubio se acercó a él y con paciencia selló su promesa con un beso casto.

Aquella mañana sería muy difícil de olvidar para ambos jóvenes.


Buen día! (Buenos días, buenas tardes, mucho gusto; diría mi abuela).

Cómo andan? Completamos la primera semana, qué emoción. Esta vez le volví a pedir el título, y la canción, prestados a Paul. Ojalá les haya gustado.

Mañana viene la temática que más me entusiasmó desde que empezó esto. Si se encuentran con que actualicé en la madrugada, mi emoción no está en falta.

Nos leemos mañana!

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