Queen Week 2020

You win again

Día 13

Tema: Videojuegos

Shipp: Deacury (John Deacon x Freddie Mercury)

Etiquetas: FLUFF

—¿Crees que se aburran en algún momento?— Preguntó John aburrido después de dos horas de ver a Brian y Roger jugar una y otra vez aburridos partidos de fútbol en la última versión del juego de la FIFA.

—Te ganaré el próximo,— repetía el rubio luego de cada partida perdida.

—Ya quisieras, Rog.— Concluía Brian y reseteaban el juego.

—Quizás jueguen sólo uno...— Freddie fue interrumpido por un grito frustrado de Taylor, que acaba de perder la oportunidad de una gran jugada.— O quizás no podamos utilizar la televisión hasta mañana.

El menor negó molesto observando al otro par.

—Ni siquiera podemos pensar en paz con ellos gritando así. Y no creo que Roger tarde mucho en comenzar a golpear los muebles.

Aquella predicción de Deacon no tardó en cumplirse.

—¡¿Cómo carajos lo haces?!— Gritó el rubio pateando el mueble sobre el que reposaba el televisor provocando que se tambaleara un poco.

—Cálmate, rubia histérica.— Freddie intervino antes de que Brian pudiera responder.— Llegas a dejarnos sin televisión por hacer un berrinche, y te las verás conmigo.— Tomó la mano de John luego de concretar su amenaza.— Vamos a caminar, cariño.

—Pero yo estoy esperando que terminen de pelearse para ganarle también a Roger...— el castaño lo miró con un puchero.

—Puedes hacerlo cuando regresemos, Roger jugará igual mal cuando lleguemos.

—Tú no me has visto jugar de verdad,— el rubio volteó a verlo ofendido.

—Pero yo sí,— Deacon lo miró con autosuficiencia.— Y también te ganaría.

—Ya vámonos, cariño. Nosotros sí somos adultos. Déjalos que sigan peleándose por su jueguito.

Freddie hizo más fuerte su agarre y sin darle tiempo de reaccionar al menor, lo obligó a salir del departamento.

—Amor... mi teléfono...— le reprochó.

—¿Te estoy ofreciendo pasar la tarde juntos y tú llorarás por un celular?— El moreno fingió indignarse y continuó caminando arrastrando a su novio.

Lo guió hasta una cafetería no muy lejos del edificio donde vivían. Al llegar se sentaron en una mesa en la esquina del salón.

Agradecieron a la mesera con una amable sonrisa al llegar con la orden y luego Mercury fue el primero en hablar.

—No se les pasará por un buen rato esa manía de pelear cada vez que jueguen. Deberíamos mudarnos.

El castaño rió hasta que sintió la mirada seria de Freddie sobre él.

—Oh... hablabas en serio.— Dejó de reír.

—Pues... ya llevamos tres años de relación, cielo. Creo que ya va siendo hora de que tengamos nuestro espacio. Y yo tengo un buen trabajo, tú terminarás pronto tu maestría. No tenemos por qué hacer nuestra vida alrededor de ese par gritando por un partido de fútbol que ni siquiera es real.

—Suena bien. Hagámoslo.

*

Dos meses habían pasado de aquella tarde. Era el día de la mudanza y Roger y Brian los ayudaron a bajar las cajas del camión temprano en la mañana. Después de almorzar, se ocuparon de comenzar a acomodarlas.

Para el atardecer, todos estaban cansados. Se sentaron a descansar en la sala, que era el único ambiente del departamento que estaba casi terminado.

—¿Qué dicen si jugamos a...?— Comenzó el rubio. John, sentado en el regazo de su novio, se sobresaltó y no le permitió terminar la frase.

—No. Luego ustedes se ponen a gritar. Perdón, tú te pones a gritar. Y no. Acabará siendo como si no nos hubiésemos mudado.

—Qué carácter.— Murmuró Roger.

Media hora después de que su idea fuera rechazada, Taylor decidió que era hora de irse, dejando a los dueños de casa finalmente solos.

—Es nuestro hogar, Deaky.— Freddie sonrió.

—Nos libramos de Roger,— bromeó riendo el menor y lo besó.— Te amo.

—Y yo a ti.

Buenas! Cómo andan? Anteúltimo día de la Queen Week :(

Gracias por estar del otro lado. Espero que hayan disfrutado de esta entrega.

Nos leemos mañana! Cuídense!