𝑭𝑳𝑨𝑺𝑯𝑷𝑶𝑰𝑵𝑻 ━ ❝ i was young my heart was always on the run but you made loving fun ❞
donde barry allen se
enamora de su mejor amiga,
y esta vez no es iris west
TEMPORADA 3 DE THE FLASH SERIE DE THE CW, TODOS LOS PERSONAJES EXCEPTO AUDREY...
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⚠️ ANTES DE LEER ⚠️
Mientras releía la historia antes de volver a escribir me di cuenta de unas cuantas inconsistencias como el hecho de que Thalia era la jefa de la editorial en la linea original (no la de Flashpoint) y simplemente me lo metí por el culo cuando la linea se restauró. En vez de mandar tooooda la historia a borradores para editar eso y otros detalles decidí editarlos sobre la marcha porque sé lo insoportable que es que borren una historia que lees y la vuelvan a subir una vez editada.
El único gran cambió que habrá es que Audrey ya no será la jefa de la editorial sino la subjefa, consiguió el ascenso a jefa cuando Barry cambió la linea de tiempo, por esto sus padres murieron. Para no cambiar el peso de esto, decidí que un ascenso a ser la subjefa también sería un buen motivo de celebración.
Sin más que decir, bienvenidas de nuevo a Flashpoint
⚠️ FIN DEL COMUNICADO ⚠️
Audrey despertó con un gran dolor de cabeza, abrió los ojos despacio solo para darse cuenta que la vista la tenía algo nublada y que el dolor de cabeza había traído consigo un mareo de los mil demonios.
Parpadeó varias veces, soltando un quejido lleno de agobio mientras intentaba recordar qué fue lo último que hizo antes de perder el conocimiento. Estaba en STAR Labs, sus amigos súper estaban siendo controlados por los Dominadores y querían matarlos a ella, a Barry y a Oliver.
Oliver.
Una luz se lo había llevado antes de que Audrey se desmayara. Aquel recuerdo la hizo incorporarse de sopetón provocando unas punzadas agobiantes en sus sienes y gruñó.
—No usar mis poderes en exceso —murmuró, presionando una de sus manos contra su sien—. Lo tengo.
Miró la habitación en donde estaba que no lucía para nada conocido. Ni las sábanas, ni la decoració. No había nada que le dijera en dónde estaba hasta que la puerta se abrió y una cuidadosa Caitlin asomó la cabeza por la rendija que había sido abierto.
—Oh, estás despierta —dijo, entrando a la habitación con un vaso lleno de lo que parecía ser jugo de naranja y unas pastillas en la otra.
