Sólo Mírame © [Alone #1]✔️

||Flashback 3||

Angry Too — Lola Blanc.

Flashback / Analepsis.

Diciembre cinco (05/12)

Tres días antes de la hora cero.

Narrador omnisciente.

   La chica llevaba un vestido negro, su maquillaje era tan natural que ni siquiera parecía que llevaba. Sus tacones resonaban al caminar y su perfume se podía sentir desde muy lejos. Su caminar era perfecto, ella lo era. Aunque era una máquina sin emociones, era perfecta. Se adentró a la fiesta de Mike Jones.

Primero los números, luego la fiesta. Se aseguró de remarcar lo importante.

   Al llegar a la puerta de la casa, entró sin problema. Estaba abierta de par en par, invitados entraban y salían del lugar por esa puerta. Ella llegaba tarde siempre, le gustaba hacerse notar.

—¡Samara! —exclamó Amy desde el fondo al ver a Samara entrar.

   El Círculo completo estaba de pie al final del pasillo. Cuando la gente escuchó el nombre de Samara, giraron hacia la puerta de entrada.

Le gustaba hacerse notar.

   Los susurros comenzaron, todo se oía. La música aún no estaba del todo alta, se oía todo lo que decían. La halagaban, insultaban, chisme tras chisme. Samara sonrió con satisfacción al recibir toda la atención por parte de los estudiantes. Caminó a través del pasillo y los estudiantes que andaban por allí se hacían a un lado para que ella pasase.

Parecía una maldita reina.

Y aunque muchos lo negaran, Samara tenía el control por donde sea que pase. Marcaba territorios y los dejaba a su nombre, convirtiéndolos en su propiedad.

   Cuando terminó su recorrido y llegó a su destino, su mirada recayó en el indefenso Mike. Llevaba una simple camiseta azulada con algún que otro detalle. Samara sonrió en dirección a él, sin que nadie más lo notara.

—Si que te gusta llamar la atención, ¿eh? —bromeó Liam.

—Soy la maldita reina de este pobre lugar, ¿qué pensabas que haría? —le siguió el juego.

   Ness le entregó un trago, uno bien fuerte para comenzar genial la noche. Las miradas entre Gabe y Samara habían comenzado. Él hablaba con Marko mientras la observaba a ella. Aún seguían enfadados el uno con el otro, y ella no quería que eso cambiase.

Será mejor comenzar con el plan antes de que Gabe se decida hablarme.

   Alejándose de las chicas se acercó a Mike, quién estaba sentado en su escalera. Solo.

—¿No es tu fiesta? —Ella tomó asiento justo al lado de Mike.

   Él soltó una risa sarcástica.

—Tú bien sabes que llamar la atención no es lo mío. Me gusta hacerlo, pero nunca lo logro. —Claramente—. Tú si lo haces bien. —Giró la cabeza en dirección a la chica—. ¿Cómo lo haces, Samara?

   Ella sonrió, halagada.

—Además de que soy la hija del alcalde, tengo un hermoso cuerpo y personalidad, admítelo. —Rió. Él repitió la acción de ella, observándola fascinado.