「•KING•」↳ʏᴏᴏɴᴍiɴ

V E I N T I O C H O

—Come, Jimin. —me dijo Yangmi que ya estaba cumpliendo con su segundo día de trabajo.

No quería comer.

Tal vez Shigan era más delgado que yo.

—No tengo mucha hambre.

—Pero tienes que comer. —le apoyó Jihyo.

Tomé otro bocado de mi tortilla y lo mastiqué sin ganas.

Seungri entró a la cocina y me sonrió.

—El auto ya está listo. —avisó.

No quería ir con mi chofer.

Tal vez Shigan era mucho más humilde y no era millonario, ni tenía su propio chofer.

—Gracias, Seungri, pero yo voy a conducir solo.

—¿Solo? Pero ese es mi trabajo.

—Sólo por un par de días, dentro de poco cumplo los dieciocho, tengo que ser más independiente.

Él asintió.

—Y por cierto, voy a darte tu paga adelantada. Ven conmigo.

Yo estaba de mal humor, pero quería hacer alguien más feliz.

Además tenía una idea desde hace mucho.

Seguramente Shingan era tan amable que donaba de dinero a los niños con cáncer y salvaba perritos de la calle.

Salí de la cocina dejando mi desayuno a
medio comer y abrí mi mochila que estaba en uno de los muebles, saqué un sobre y se lo tendría Seungri.

—No entiendo porque me pagas por adelantado sólo a mí si... Santo.

Comenzó a leer la nota que había dentro.

Sonreí al ver su expresión.

—Dios, Jimin no. Ya haz hecho demasiado y esto es mucho más de lo que hubiera deseado.

—Tú lo mereces, ella lomerece. Ambos lo merecen.

Los ojos de Seungri cristalizaron y me dio un gran abrazo.

—Gracias. Se va a cumplir mi sueño.

Me gustaba hacer felíz a los demás.

Y por si tienen la duda le di dinero a Seungri para que le comprara un anillo noona.

Asentím el entregó las llaves del Mercedes y yo corrí al estacionamiento.

Abrí la puerta del auto, arrojé mi mochila al asiento del copiloto y lo encendí.

Tenía tiempo sin conducir, sólo la motocicleta que conducía hace poco.

—¡Allá vamos!— exclame.

^^

Casi muero.

En el camino al instituto casi chocó a un auto, dos ciclistas y a una anciana. Aparte de haber recibido una multa por no llevar el cinturón de seguridad,en mi defensa se me olvidó.

Bajé del auto y caminé por el Instituto para llegar a mi casillero.

Cuando abrí mi casillero vi a Hoseok dirigiéndose hacia mí.

—Hola, Jimin.

—Hola, Hoseok

—¿Cómo va todo?

—No muy bien— me encogí de hombros.

—Cuéntame.

— Bueno, Yoongi me habló de su ex novio.