Secretos Revelados [DIGIMON]

Muerte en la fiesta.

Meiko se fue junto a Koshiro hasta la cocina de aquella gran casa, Koshiro miraba fijamente a Meiko quién se veía muy nerviosa y jugando con sus manos.

— ¿Qué era lo importante que debías decirme?

— No te molestes con Mimi-san, por favor.

— ¿Pasó algo con ella?

— Sí, ella está muy confundida... Tú le gustas y a la vez le gusta Yamato-san. Pero no sabía que te iría a besar, me dijo que lo haría cuando se decidiera con cual jugarse el corazón.

— Wooh. –Comentó Koshiro bajando su vista un momento, él estaba feliz en un principio porque Mimi le había besado y también le impresionó. Pero al saber aquello, suspiró con pesadez.- A-Algo sospechaba, digo ella es muy unida a Yamato-san... Me había ilusionado, cuando me besó, ¿Sabes?

— Perdón Koshiro-kun, no quería decirte esto...

— Pero debías hacerlo...

— No puedo decir nada, Koshiro-kun. Me voy, quedé de reunirme con Daisuke-kun.

— Tranquila, ve con cuidado por favor.

— Sí, gracias Koshiro-kun y perdón por darte esta noticia.

Meiko salió de la cocina, estaba triste por el hecho de tener que traicionar a su amiga, más porque ella la quería mucho y fue unas de las primeras en integrarlas al grupo. Caminó por una larga escalera, encontrándose con la habitación donde quedó con reunirse con Daisuke, tenía un presentimiento de que algo malo podría pasar y si ella tendría que morir aquella noche, le pediría a su menor hacer algo que nunca se atrevido hacer con algún chico. Una vez entró, Daisuke se encontraba fumando en una gran pipa, ella negó con su cabeza reiteradas veces y se acomodó a su lado.

— Meiko-san, ¿Fumarás conmigo?

— S-Sí, quiero pedirte un favor eso sí. –Comentó Meiko un tanto nerviosa, jugando con sus manos.-

— ¿Qué sería?

— Tal vez no vivamos hasta mañana, quiero saber si... -Tragó saliva un tanto sonrojada.- ¿Puedes darme mi primer beso? Ah y también. –Cuestionó sonrojada a más no poder.- ¿P-Puedes q-quitarme la virginidad?

— ¡Meiko! ¿Enserio me estás pidiendo eso a mí? –Cuestionó un impresionado Daisuke.- Yo si se besar, pero nunca he tenido sexo. –Confesó Daisuke, sonrojado a más no poder.- Pero tienes razón quizás no vivamos mañana.

— C-Claro que te lo estoy pidiendo, tanto tú como yo sabemos nuestro destino. –Dijo al borde de las lágrimas.- Ya dame eso. –Meiko le quitó la pipa a Daisuke.- ¿Cómo se hace?

— E-Está bien, tendremos nuestra primera vez... -Dijo de una sola vez y al notar que le quitaba la pipa, solo se puso a reír un momento.- Debes posar sus labios, aspirar el humo con tu boca, mientras yo prendo en ese orificio. –Le indicó Daisuke.-

— G-Gracias, Daisuke-kun. –Susurró obedeciendo todo lo que decía Daisuke, notó que este prendía y ella aspiró, lo cual comenzó a toser demasiado, provocando la risa de Daisuke.-

— Con calma, Meiko-san. Hazlo de a poco, ¿Si?

— C-Claro, ¿Qué sentiré?

— Felicidad.

— Necesito esa felicidad. –Comentó Meiko intentando fumar nuevamente, ya cuando lo hacía reiteradas veces comenzó a sentirse más aliviada y feliz.-

Por su lado Yamato se quedaba unos minutos parado frente la puerta del baño, no sabía cómo hablar con Mimi y más luego de lo que escuchó. Tomó aire, lo cual tocó la puerta y Mimi no dudó en abrir esta. Él se encontraba mirándola fijamente, la notaba triste completamente.