El baile.

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Todos al escuchar a Iori quedaron impresionados, no sabían que él se había enamorado de Zoe y él más impresionado era Yamato, ya que él había rechazado a Zoe. No sabían que decir los demás, ya que aquello que decía Iori era algo que había dañado a su corazón completamente.

— Yo también debo confesar algo... -Dijo en seco Yamato.- Sólo debía decir a Iori-kun, pero prefiero aclarar todo... Bueno una vez en una de las fiestas por un reto me tocó besar a Zoe, yo lo tomé como un juego, pero ella se ilusionó y pronto se me confesó. Me dijo que llevaba enamorada de mí hace mucho, pero yo la rechacé, le dije que no podía corresponderle ya que me gustaba otra chica y sólo pensaba en ella. Zoe lloró frente mío, pero yo no pude hacer nada, ya que mis sentimientos a esa chica son más fuertes y rompí su corazón.

Iori se veía molesto, más al escuchar aquello que decía Yamato, pero iba evitar conflictos frente a todos y después hablaría con él cuando los demás se fueran. Los chicos estaban impresionados, pero no decían nada ya que todo el ambiente estaba tenso, pero faltaba una última confesión y esta era la de Koshiro.

— Soy adoptado, lo descubrí hace dos años, me hicieron la vida imposible cuando encaré a mis padres y me avergüenza mi familia. Más cuando ellos tienen una visión mía que no es y no quiero hablar del tema.

Mimi miró a Koshiro preocupada, colocando su diestra en su espalda para animarlo y todos estaban nuevamente en silencio, hasta que Hikari quebró este.

— Chicos, lo mejor es que me vaya con las chicas. Mañana tratemos de aclarar todo, ¿Si? –Comentó Hikari.-

— Sí, lo mejor es que vayamos. –Dijo en seco Mimi, tomando la mano de Miyako.-

— Chicas adelántense debo hablar a solas con Taichi-san y Yamato-san. –Confesó Sora.-

— Tranquilas, nosotros las iremos a dejar a la habitación. –Dijo Yamato sin más.-

Las chicas afirmaron con su cabeza, despidiéndose de todos y salir de la habitación. Caminaron juntas hasta su residencia, entrando a la habitación y colocándose los pijamas. Por su lado Sora le pidió a Iori que fuera con los chicos a la otra habitación, que necesitaba hablar a solas con los chicos y así Takeru, Koshiro, Iori y Ken se fueron a la otra habitación. Una vez estaban los tres, Sora se acomodó en la cama de Taichi y suspiró.

— Chicos, cuando mi padre se fue, yo caí en una depresión horrible, falté tres meses y solo les dije que estaba enferma. En realidad me había intentado suicidar con pastillas, estaba tan triste y si nos les dije fue porque estaba confundida. –Dijo sin más.-

— Pero Sora-san, hemos sido amigos de años y nunca nos contaste. –Comentó Yamato preocupado.-

— Era difícil para mí, yo realmente la pasé mal. –Comentó entre lágrimas.-

Taichi se acercó a su novia, abrazándola con sumo cuidado y sonriéndole débilmente.

— No ocultes esas cosas, los tres siempre hemos sido muy amigos, bueno ahora los dos somos novios...Pero eso no quita que me confíes las cosas, debe decirme todo y yo te ayudaré a salir adelante.

— Sí, prometo decir todo lo que sienta, ¿Si?

Yamato junto a Taichi animaban a Sora, para así salir de la habitación para dejar a Sora a su residencia, iban en silencio no sabían que decir o hacer con ella. Sólo brindarles ánimos, una vez que la dejaron ahí, se despidieron de las chicas y se fueron caminando lentamente saliendo de la residencia de mujeres. Taichi se detuvo a lo que Yamato se dio cuenta y fijó su vista en él.

Secretos Revelados [DIGIMON]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora