Si, si. ¿Bueno que puedo decirles de mi relación con Ririka?... Todo es muy tranquilo, hay confianza mutua, disfruto de su actitud aun un poco tímida y aunque me enoja que sea tan insegura de ella misma para tomar el control de algunas situaciones y mas cuando fue ella quien se animó a dar el primer beso, si lo sé es difícil de creer pero así fue.
*FlashBack*
Ririka me habia llevado a un lugar un poco mas solitario de la escuela, estaba confundida normalmente nunca hacia esas cosas... era raro, me tomó de la mano y me llevó un tanto apresurada y podía asegurar que estaba nerviosa. No habló en todo el trayecto pero tampoco dije nada.
- ¿que sucede, que hacemos aqui? -pregunté al detenernos.
- eh, Mary... yo...
Ririka se acercó a mi de manera suave, la miré algo sorprendida. no me miraba fijamente pero aún así podía ver su rostro en su totalidad... nunca la había visto tan de cerca.
La peligrosidad de su cercanía me hizo ruborizar, pude notar tambien el rojizo en sis pálidas mejillas, no entendía que carajo estaba a haciendo.
-yo... -dijo suave, para luego poner ambos brazos en mi cuello, y extrañamente mi cuerpo reaccionó poniendo mi mano en su cintura.
- ¿que carajos estas haciendo Riri...? -no pude terminar de decirlo ya que sus labios habia callado los mios.
Al principio me quedé paralizada pero luego me perdí en el dulce sabor de sus labios, fue extraño pero en ese momento me dí cuenta que quería tener esa sensación diariamente.
*presente*
Pero lo mas importante, es que la amo un poquito más cada día.
- ¿a quién le hablas, Mary?
- a nadie... -reí.
