One-Shot's KatsuDekuFem

Falda.

-Katsuki niño x Izuku niña.

-AU preecolar.

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En aquel vecindario repleto de infantes, los niños corrían y jugaban en el parque.

Un grupo de niños jugaban a la pelota, y una bonita niña de apenas cinco años se acercó muy feliz.

Aquella pequeña niña sin quirk que quería jugar.

—¿Puedo jugar con ustedes, por favor?— sus pequeñas manos se aferraron a su rosada falda, tratando de ocultar su nerviosismo.

—¿Eh? ¡Claro que no, las niñas no saben jugar a la pelota!— exclamó un niño quien al parecer era el líder de aquella pequeña pandilla.

—Pero yo sí sé hacerlo...— decía con tristeza la pequeña niña, tratando de convencer a los niños.

—¡Que no! ¡Vete fea!— pronunció el infante ahora molesto, se acercó a Izuku y le jaló con violencia su pequeña coleta.

E Izuku comenzó a llorar mientras tomaba su pelo intentando parar el dolor.

Y a lo lejos un niño rubio ceniza se acercó corriendo hacia de donde provenía el llanto.

—¡Deku!— exclamó con horror el pequeño rubio al ver llorar a la niña, y sin perder tiempo se colocó delante de ella. —¿¡Qué diablo le hiciste, pedazo de basura!?

Agresivamente decía Katsuki quién al ver a los niños reírse de ella sabía que fueron ellos.

—¡Solo no puede jugar porque es fea! ¡Y las niñas tienen piojos!— con burla decía el niño que sostenía la pelota.

Y Bakugo creó pequeñas explosiones bastante enojado.

—¡Deku no es fea y tampoco tiene piojos! ¡Ella es la niña más bonita de la historia!

Y sin escuchar los gritos de Izuku se abalanzó hacia el niño comenzando a golpearlo.

—¡No, Kacchan!— gritaba la pequeña quien asustada al ver a su amigo peleándose y no saber que hacer.

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—Kacchan, ¿Estas bien?— con preocupación decía la pequeña quien veía a su amigo sangrar por la nariz.

Bakugo al sentir la asustada mirada de su amiga recuperó su compostura, no se vería débil con ella presente.

—¡Claro que sí, estúpida Deku! ¡¿Quién me crees!?— con brusquedad se limpiaba la nariz y tomó la pequeña mano de Izuku. —Te eh dicho que no les hables a los demás, que te iban a molestar, ¿Ya no te duele tu coleta?

Deku negó felizmente.

—No, me siento mejor, gracias, Kacchan— sonrió con dulcura y al pequeño Katsuki casi se le para el corazón, comenzó a caminar tomando la mano de Deku.

—Si, lo que sea, ya sabes que yo nunca pierda, tonta— con arrogancia decía, tratando de ocultar su nerviosismo. —Ahora vamos a mi casa a jugar, mi vieja tiene galletas.

—Ah, Kacchan— llamó la pequeña y Katsuki la observó esperando a que hablara.

Deku soltó la mano de Bakugo y se acercó a él, dándole un pequeño beso en el mejilla, Katsuki rápidamente se puso rojo y tocó su mejilla alarmado.

—¡Estúpida Deku! ¿¡Qué fue eso!?— gritó totalmente avergonzado aún tocando su mejilla.

Deku se acercó a su rostro y rió con alegría.

—¿En verdad crees que soy la más bonita?

Katsuki comenzó a tartamudear sin saber que decir.

—¡Y-yo, nunca dije algo así, tonta!

Deku sin dejar de sonreír tomó la mano de Kacchan y comenzó a caminar.

—Vamos, Kacchan, las galletas nos esperan, y podemos jugar a tomar el té.

—¡Yo no quiero jugar a eso!

Y así, los pequeños niños caminaban por el vecindario tomados de las manos, sin saber que les pararía el futuro.