Aroma A Café [YoonNam]

|Chaqueta|

NamJoon había decidido ir hoy más temprano de lo habitual ya que está vez su madre lo acompañaba porque quería saber dónde se desaparecía su hijo por horas.

Ambos ya se encontraban sentados esperando su orden.

-Hijo, ¿Vienes a ver a alguien en especial a este lugar?-Levanto sus cejas.

-Eh...no, solo me gusta el ambiente del lugar es todo-Sonrió.

-No te creo nada pero bueeno,¿Cómo se llama? ¿es lindo?-Sonrió.

-Mamaa!-Se tapo su rostro y su madre río.

-Esta bien, algún día me dirás-Lo señaló con su dedo índice fulminandolo.

-No se de qué hablas-Volteo a otro lado.

El mesero llegó con las órdenes listas dejando todo en la mesita retirándose después.

-Esto es delicioso!-Dijo dando un sorbo de su café-Tienes buen gusto-Sonrió.

-Claro es la cafetería favorita de Yoon.....-Al darse cuenta lo que iba a decir se puso nervioso-De Hoseok!-Sonrió.

-¿Hobi? Sospechoso-Entrecerró los ojos.

Después de estar un buen rato hablando con su madre está se tuvo que ir a trabajar permitiendo que Nam se quedará un tiempo más en la cafetería.

Ahora solo queda esperar a Yoonie, el cual en unos minutos entró robando por completo su atención.

Se maldijo al no traer sudadera o paraguas porque había comenzado a llover y hacia frío, siguió observando a el morocho apartando la mirada cuando esté lo miraba fijamente haciéndolo sentir nervioso, hasta que pidió la cuenta pero en esta venía un papelito.

Lo abrió poco a poco dándose cuenta que era un número de teléfono, miro todos a su alrededor y nadie lo miraba, extraño, aún así guardo aquel en la funda de su celular.

Cuando la lluvia se calmó un poco dió una última mirada a Yoonie y salió cruzando la calle cubriéndose con sus brazos la lluvia.

Maldita sea se culpaba una y otra vez, de repente sintió que le colocaron una chaqueta en sus hombros haciéndolo girar rápidamente.

Se quedó congelado al ver que se trataba de YoonGi, sintió su cara arder al tenerlo tan cerca y estaba seguro que era un tomate.

Yoonie tomo su mano colocándola en el mango de aquel paraguas sintiendo la calidez de esta, simplemente no sabía cómo reaccionar a tantas emociones.

–Cuidate, podrías enfermar-Menciono acariciando su cabello mientras sonreía, esa voz...esa maldita voz, vio como Yoonie se alejaba corriendo y después reaccionó saliendo de su trance.

–¿Cómo le haces esto a mi corazón Min YoonGi?-Dijo en voz alta, tocó su cara y estaba ardiendo.

Después de haberse recuperado siguió su camino a casa disfrutando del olor de Yoonie impregnado en la chaqueta.

Tenía su chaqueta y actuaba como una colegiala enamorada, esa noche Nam durmió abrazando la chaqueta deseando que algún día fuera Yoonie el que estuviera dentro.

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Hola soy M!
Si llegaste a esta parte gracias!
Y continua....