Capítulo 2.

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Las luces traspasaron las delicadas y estropeadas cortinas.
Mars daba vueltas en la cama mientras gruñía. Su barriga también emitia algún que otro sonido.

Sus cálidos pies tocaron el frío suelo y eso le produjo un pequeño escalofrio.
Seguidamente alcanzó su bata y se cubrió con ella.
Cuando apareció en el salón de la casa, se encontró a Natt en el sofá.
-Hm, hola. ¿Qué haces por aquí?
-Me pasé a verte y aunque tu madre me dijo que estabas durmiendo decidí esperarte.

Mars se sentó a su lado en el sofá.
-¿Ocurre algo o...?
-No,no. Tan sólo te echaba de menos. ¿Damos una vuelta? ¿Hay algún parque por aquí cerca?
-Al final de la calle hay uno. Espera un momento, me visto y bajo.

Después de ponerse unos tejanos y un jersey bien tupido, Mars cogió una manzana de la cocina y salió por la puerta con Natt.
-Y bien, ¿cómo va todo por aquí? ¿Tu ya has empezado las clases?
-Bien, eh, no, todavía no me he matriculado. Y creo que no lo haré.
-Vaya...
-¿Y a ti como te va?
-Fenomenal. La pandilla seguimos unida, y te echamos de menos. Bueno, alguien más que todos.
-¿A quién te refieres?
-A Noel, por supuesto.
-Bueno, estuvo bien lo nuestro. Pero me he mudado lejos, y créeme, ya no siento lo mismo por él.

Después de unos minutos llegaron al parque. Mars lanzó a la papelera el hueso de la manzana y se sentó con Natt en un banco.
-Ya. Lo s-la interrumpió Mars.
-Pues, si ya lo sabes Natt, ¿qué intentas hacer?
-Mars. Tienes 21 años. Puedes alquilarte un piso por el centro y estar cerca de nosotros.
-Sí, y el dinero lo pinto.
-Mars...-y le coge las manos a Mars.
-Natt, estoy bien, de verdad.
-Tienes que empezar tu vida. Entiendes que lo digo y hago por ti, ¿cierto?
-Ya lo sé. Simplemente no tengo medios para eso. No tengo medios para la universidad. Ni para un alquiler.
-A ver, no intentes empezar la casa por el tejado.
-Y que me sugieres que haga.
-Busca trabajo.
-Oh, muy bien. ¿Dónde?

Hubo unos segundos de silencio.
-Tranquila. Lo encontrarás.
-¿Has venido hasta aquí para darme lecciones sobre como tengo que vivir?
-Sí.- hace una ligera pausa- y porque te echaba de menos.

Mars abrazó a Natt. Aunque no quería darle la razón, ella sabía que su amiga tenía razón. Odiaba estar en el lugar que vivía. Necesitaba un cambio. Vivir sola. Estudiar. Volver a estar con sus amigos.
¿Por dónde empezar? ¿Y cómo?

Cuando llegó a casa, y mientras tarareaba una canción de su grupo favorito, sacó el CD y empezó a mirar las imágenes que había dentro de la portada.
'Ojalá la vida me sonriera' pensó unos instantes antes de tirarse en la cama y respirar profundamente.

Be my reality [fanfic Dan Reynolds]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora