I

24 2 0
                                    

-Estas agarrando muy débil la espada.- volteé los ojos porque lo que decía era bobo, nunca he tenido un agarre débil con las armas - Concéntrate

Cruzamos la espadas, evite un golpe dando un paso hacia atrás con mi espada al frente- Deja de decir locuras y lo haré, con lo que has dicho me da risa.

-Ohh claro, mi hermanita es la señorita yo peleó bien.- dijo Magnus en broma, riendo un poco, siguiendo con la pequeña pelea.

- Te estoy ganando y eso que eres un lobo alpha, y yo - hice un giro con la espada y me agaché con una de mis piernas logré quitarle la espada y tirarlo al suelo-una pequeña señorita según Katherine.

-Okey ya, entendí señorita - se levantó e hizo una reverencia hacia mí - pero en lucha cuerpo a cuerpo yo gano- y se me lanzó encima, intenté evitarlo pero no lo logré, estaba en el suelo y sin aire porque Magnus, un hombre lobo que pesaba como una tonelada me cayó encima. - Ayyy que linda te ves con tu carita toda roja.

-Idiota- le intente golpear el hombro pero no tenía fuerza, sentía que iba a desmayarme por la falta de aire- Ai-r-ee, ne-cesito air-e.

-Bien, ya que eres amable y tan adorable, te dejaré respirar - giro para poder recostarse en el suelo a mi lado y yo di un gran respiro, tomando todo el aire que podía - no exageres, no te empuje tan fuerte, apenas fue un empujón.

-Claro, como a ti no te cayó encima un idiota que pesa tanto como un elefante. - Estire mis alas y vi el techo del edificio el cual era de vidrio, bostecé estirando todos los músculos de mi cuerpo intentando disipar el dolor de mi cuerpo. - ¿Qué hora es? ya se ve algo oscuro

- Mmmm... - vio el reloj de su bolsillo-
Akila... Emmmm creo que hay que empezar a correr.

-¿Qué? - No podía ser tan tarde aún, todavía no era el atardecer. Me levanté tan rápido que casi me caigo.

Magnus empezó a correr y yo lo seguía bastante cerca, cuando estuviera fuera del edificio de entrenamiento podría volar y él se transformaría - Son las 4:30, debemos estar listos a las 5:15 y estamos sucios y sudados- llegamos a la puerta y yo empecé a elevarme de a poco mientras el intentaba sacarse su camisa- maldición, porque no pusiste alarma. - finalmente lo logró, y se transformó tomó la camisa entre sus dientes para así al llegar, cubrirse un poco.

-Dijiste que tu lo harías, por Hades es mi fiesta y estoy llegando tarde.

Aleteé un poco más con tal de ganar mas velocidad, luego de un par de minutos llegamos a casa, Magnus se destransformó y alzó su mano, me acerqué a él, y lo cargué, llegamos al balcón más cercano lo lancé y aterrizé, abrimos la ventana y entramos lo más callado que pudimos.

-Por si no se dieron cuenta par de bobos, están en mi cuarto dejen de caminar así y apresurense- volteamos a ver a Demetrius, los dos con un pequeña sonrisa - les queda poco tiempo, yo que ustedes corría a bañarme- Magnus salió primero, yo iba detrás, me acerque a la puerta -
Akila,-me llamó Demetrius, lo voltee a ver- Feliz Cumpleaños, no tuve oportunidad de decírtelo en el desayuno, más tarde te daré tu regalo. - me dio una de sus grandes sonrisas- ahora creo que deberías ir a ducharte, no soy lobo y hasta aquí siento tu aroma a lodo.

-Ja-ja, muy graciosito hermanote- salí de ahí y me dirigí a mi habitación, nada más entrar me quite mis preciosas botas.

Me quite toda la ropa, y me metí a la ducha sin esperar a que el agua se calentara, me cubrí de todos los objetos de limpieza que pudieran quitar toda la suciedad que cargaba encima. Adoraba las pequeñas luchas que tenía con Magnus pero a veces era muy brusco, salí 10 minutos después luego de asegurarme que estuviera lo más decente posible ademas de verificar que no tuviera ningún moretón visible.

AkilaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora