Era una tarde calurosa, pero a Sakura le encantaba caminar por el parque y ver a los cerezos, siempre era su camino de la academia a su casa, adoraba la tranquilidad del lugar y respirar aire puro de los árboles, era como sentirse viva cuando respiraba el olor de los cerezos combinado con el olor de los árboles.
Llegó a su casa y todo estaba en total silencio, tal era el ambiente profundo que hasta sintió escalofríos, pues no era como otras veces que había movimiento en su hogar, el olor de la comida casera de su madre y la risa fuerte de su padre cuando su esposa lo regañaba por no hacer lo que ella le pedía, sí, ahora se sentía diferente ella lo sabía.
--Sakura, hija pasa por favor y sientate, tenemos algo de que hablar.- dijo calídamente su madre.
Ella se sentó frente de ellos.--Sakura hay algo que no te hemos dicho porque pensamos que jamás pasaría pero nuestros peores miedos se han hecho realidad.- dijo Mebuki
A este punto Sakura ya estaba bastante preocupada, nerviosa y podía cortar el aire sólo con el suspiro profundo de sus pulmones.
-Hace un tiempo hicimos un pacto con una familia llamada Uchiha, tu padre acababa de perder el restaurante de fideos, yo sabía que estaba embarazada pero estaba incapacitada, fuiste un embarazo muy difícil, podía perderte y también mi vida, le debíamos dinero a muchas personas que nos querían hacer daño, incluso trataron de inculpar a tu padre en un crimen, lo estábamos perdiendo todo incluso a ti, un día me puse muy mal, yo enferme tanto que podíamos morir las dos, no teníamos dinero para el doctor, tu padre estaba en la cárcel por un crimen que no cometío, debíamos dinero el cual era una gran cantidad, no me quedaba nada así que fuí con el jefe del clan y solicité un préstamo, nos lo dieron pero el jefe no era tonto y sabía como sacar provecho de la situación por lo que a cambio de firmar un convenio, el cual se establecia que nosotros debíamos dar en matrimonio a nuestra primogénita con su primogénito, que tu vivirias con ellos bajo su resguardo y a cambio ellos te darían todo los lujos, cubririan tus necesidades y nosotros también nos correspondería una cantidad mensual. Lastimosamente la unica forma de romper el convenio es pagándoles todo lo que nos dieron, pero han pasado casi 19 años y la tasa de interés es demasiado alta, no podemos pagarla, ni vendiendo esta casa, el restaurante y juntando nuestros ahorros podríamos pagar una tercera parte. La familia uchiha no sólo nos dio dinero para el doctor, también para solventar las deudas, recuperar el restaurante, la casa y sobre todo sacar a tu padre de la cárcel.- dijo Mebuki mientras las lágrimas corrían por sus mejillas, se veía tan deprimida que Sakura sintió tanta pena por ella y deseo no estar en su lugar.
Pero todo cuando cayó en cuenta de toda la hisotria, el pacto celebrado entre sus padres y el tal Uchiha fue como un balde de agua fría en Sakura, que se quedó sin palabras, sólo los miraba a ambos, no sabía si quería llorar, reír, indignarse, enojarse, insultarlos o huir, puesto que sus padres prácticamente la habían vendido, se sentía defraudada y confundida.
-¡O SEA! ¿QUÉ ME HAN VENDIDO PARA SALVAR SU PROPIO PELLEJO?- dijo Sakura, estaba tan cabreada que sólo podía gritar y ponerse roja del coraje.
Gritó, insulto a la vida, a los dioses y a todo a su paso, después de 30 minutos de llorar, gritar y maldecir pudo calmarse, pero su expresión no era nada alentadora.
-¿Cómo han podido hacerme esto? Traicionarme de esta manera y decirmelo apenas. ¿Acaso no sé han puesto a pensar en mis sentimientos u opiniones sobre esto? Tenía el derecho a saberlo desde hace mucho. ¿Por qué apenas me lo dicen?- exclamó Sakura, quien estaba tan cansada y deprimida que sus palabras apenas eran audibles.
-Lo sentimos mucho, no pensamos que realmente fuera a llevarse acabo el pacto, el señor Fukaku murió hace un tiempo junto con su esposa, pensamos que nadie podía recordarlo ni el nuevo jefe del clan. Han pasado muchos años y no tuvimos noticias del asunto.- señaló ahora Kizashi, devastado casi igual o más que su esposa e hija.
-¿y ahora qué sucede? ¿Han venido a reclamarme cual vaca de ganado?- exclamó Sakura sarcásticamente.
-Hace unos días vino el hijo mayor de Fukaku a hablarnos del pacto, señaló que quería que te fueras a vivir con él como su protegida, que él pagaría toda tu educación y que no habrá ningún matrimonio arreglado, él quiere que sigas tus estudios y por eso es necesario que vivas con él, para que pueda ayudarte y a nosotros también.-. Dijo Mebuki
-Ajá¿En serio irme a vivir con él? sí como no, sí me rehusó¿Qué puede pasar?- dijo Sakura.
-lo perdemos todo, te casarás con él de forma obligatoria y no podrías continuar con tus estudios, se acabaría tus sueños de tener una carrera como ninja-médico, no puedes huir porque te terminarán encontrando y será un peor destino para ti. Se que hemos arruinado tú vida, pero esto sólo es temporal, son 7 años solamente, hasta que termines tus estudios. Son 7 años que vivirás en es mansión y después podrás regresar a tu vida normal, eso es lo que dicen los nuevos términos del pacto que hizo el señor Itachi, lo hemos leído todo y no suenan mal, ni tampoco hará algo que no te sientas agusto, podrás venir aquí cada que quieras y nosotros visitarte a ti.- dijo kizashi.
-Padres, no sé que decir, esto es tan extraño para mi, vivir en algún lugar que no sea mi hogar, ni tener mi cómoda cama o mi pequeño jardín de Cerezos que siempre acostumbro visitar. Haré todo por ustedes, no quiero que realmente sufran por mi, pero deben entender que nunca me casaré con ese hombre. Además en serio quiero ser ninja médico y aunque el precio es alto, lo pagaré. Me deben mucho, voy a sacrificar 7 años de mi vida por algo que no es mi responsabilidad ni mi obligación es totalmente suya.- señaló Sakura muy decidida pero más serena.
-¿En cuánto tiempo se supone que me iré?.-dijo Sakura.
-en dos semanas, después de tu decimoctavo cumpleaños.- dijo Mebuki.
-¿Qué? ¿Tan pronto? Demonios ni siquiera lo he asimilado.- esto si que es muy pronto, pero entre más rápido lo acepte menos duro será.- puntualizó Sakura, más para sus adentros que para sus padres.
Subió rápidamente las escaleras, se acostó en su cómoda cama mirando hacia el techo y una lágrima cayó sobre su mejilla y luego otra y otra, así hasta que su cara parecía un río abundante de pequeñas gotas cristalinas saladas, odiaba lo que estaba pasando, odiaba a la familia Uchiha incluso odiaba a sus padres, sólo esperaba que el amargo vacío no fuera para siempre y aceptaría esté trágico destino sólo para hacer su gran sueño realidad, el poder ser médico y ayudar a los demás, mucho tiempo se sintió inútil, pero ahora quería demostrarse a sí misma que podía superarlo todo, aún cuando había dolor, resentimiento y odio en su corazón.
Pero nada es para siempre, ni el amor ni el dolor, cada cosa se pone en su lugar y nos trae hacia destinos totalmente inesperados.
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EL PACTO
RandomSakura es dada en protección por sus padres a Itachi, por un pacto realizado hace mucho tiempo con la familia Uchiha. ¿Qué decidirá su destino?