Primer Paso: No hagas contacto visual con él.

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Paso 1: No hagas contacto visual con él.

Si eres nuevo en tu escuela y escuchas muchas veces el mismo nombre en tu primer día de clases, no lo pienses dos veces, solo hay tres opciones:

1) Él es un popular.

2) Él es un bravucón

3) Él es un chico que murió y su fantasma te atormentará.

Bueno, eliminemos el ultimo, pero fija tu mente en las primeras dos opciones, las cuales cualquiera de ellas es la correcta.

Si escuchas luego un "Oh por dios, allí viene" ¡No se te ocurra observar! No lo hagas, porque si no lo haces, te ahorrarás el leer todo este manual. Eso me recuerda que si lees esto significa que tú no has cumplido el paso uno, así que te diré "Si, es ardiente ¿verdad? Es perfecto, pero no está a tu alcance. Lo siento (:"

Lo que sea.

Si haces este paso, entonces ¡No hace falta que leas más! Deja esto en su lugar y vete a ser libre.

Si no has hecho este paso, tú y yo nos llevaremos bastante bien lo que queda de esto xx.

Harry cierra su libro y deja el bolígrafo en su pequeña caja de lápices de colores, reglas, gomas de borrar y marcadores. Suspira al recordar que el tampoco cumplió ese primer paso, tan fácil de escribirlo y leerlo, pero tan difícil de realizarlo.

2 de Septiembre de 2014, Secondary Younger School. Doncaster, Inglaterra.

Harry se despide del amable director de la nueva escuela donde cursará este año, teniendo en sus manos sus horarios de materias, almuerzo, salida y el código de su casillero. Esta bastante emocionado el día de hoy, ya que quiere tratar de hacer más amigos aquí, ya que en Holmes Chapel solo tenía a un chico y una chica, además de varias chicas que aseguraban ser las amigas de él, mas solo fingían eso para ser la pareja del rizado. Solo ese era su propósito.

Como sea. Harry tiene el casillero número 231 y está ubicado en el casillero 98, por lo que avanza decidido por el pasillo, varias chicas lo saludan en el camino y Harry solo les dedica una sonrisa amable, nada fuera de lo normal en su personalidad. A medida que avanza, escucha varias veces el nombre de "Louis", por lo que deduce que aquél sería uno de esos populares hipócritas y cretinos, como los que había en su anterior escuela, los cuales hacían de la vida de Harry en aquel establecimiento una verdadera pesadilla.

-... ¿Y has visto ese culo? Dios mío, deseo tanto apretarlo. - Harry alcanza a escuchar a una rubia de grandes pechos a lo lejos, mientras fruncía el ceño y rodaba los ojos, colocándolos en blanco por unos segundos.

-Es tan hermoso, envidio tanto a su novia.

Al instante Harry se imagino todo: este chico de enorme culo era un jugador de futbol estrella de la escuela y su novia era la descerebrada porrista, la cual no sabía cómo sumar pero sí como hacer buenas mamadas. Igual, a él le daba igual, él no los molestaría ni hablaría con ninguno de aquellos chicos, sino más bien se mantendría lejos de todo eso, prefiriendo ser invisible ante todos a visible y golpeado.

Se detiene al ver que llegó a su tan esperado casillero, abriendo la pequeña puerta de metal y colocando sus libros y otras cosas, sonriendo al ver como su código era fácil para recordar. De pronto, escucha como hay muchos suspiros de las chicas y se voltea, viendo a un grupo de chicos avanzar por los pasillos y sonriéndoles a todos, por lo que Harry trata de ver si sus sonrisas son hipócritas, egocéntricas o verdaderas, pero descarta al instante la ultima, porque esto es la vida real, y en la vida real hay personas buenas y malas, más malas que buenas.

Cierra su casillero y su mirada se fija en el tumulto de populares, cuando se da cuenta que ¡Niall está allí! Aquél muchacho irlandés que se fue de su escuela por el abuso de sus compañeros, se encontraba allí, con lo que parecía eran los populares. No lo podía creer, porque el recuerda que Niall era un chico muy tímido y callado, además que se sonrojaba ante cualquier mirada sobre él, pero ahora las miradas hacia el eran miles y a él no le parecía nada malo, o solo los ignoraba y sonreía para ignorarlos. ¡Oh! Su sonrisa ya no estaba con aquellos frenos gigantes que él tenía, ahora estos desaparecieron y dieron paso a una sonrisa de dientes totalmente blancos y parejos.

Harry sonríe ante eso, porque sabe que Niall siempre fue lindo, y tal vez después de todo lo que sufrió merece que por lo menos no le hagan más daño. Solo esperaba que él no se convirtiera en alguno de aquellos matones, porque sabría de inmediato que eso sería el acto más hipócrita del mundo. Así que ante ese pensamiento él solo niega con la cabeza, dándose la vuelta para marcharse a su nueva clase, pero él es tan torpe que solo le da la orden a sus pies el de moverse, pero no a sus ojos a que miren al frente, porque así podría evitar el llevarse a un chico por delante y que sus libros se caigan al piso.

Pero Harry es algo torpe a veces, es algo que no puede evitar.

-Lo lamento, en serio -murmura Harry mientras se agacha en su lugar, tomando sus libros en la mano.

-Hey, eso es común aquí, no debes pedir perdón. - el chico habla, con voz algo aguda y dulce a la vez.

Harry alza la mirada, encontrándose con el chico más perfecto que vio en su vida. Sus ojos eran azules y sus rasgos parecían tallados por los mismísimos dioses, con sus dientes perfectamente alineados y una sonrisa totalmente tierna. Por dentro crecía las ganas del poder abrazarlo o tocar sus mejillas, era tan precioso.

- ¿Sigues ahí? -pregunta el chico, y es allí donde Harry cae en cuenta que ha estado unos minutos mirando a aquél chico, provocando que se sonrojara al darse cuenta de aquello y el chico riera por lo bajo. -Toma. -le entrega los libros restantes mientras se para y le da la mano, ayudando a Harry a que se incorpore al igual que el.

-Uh, gracias. Y de nuevo lo lamento, soy algo despistado. -Harry confiesa, rascando su nuca algo avergonzado de sí mismo.

-De nuevo, no debes de pedir disculpas, eso es algo que a todos les ocurre. -Sonríe nuevamente, mostrando unos adorables colmillos a los costados de su dentadura. - soy Louis, Louis Tomlinson.

Harry observa la mano de Louis por unos segundos, por lo que no duda en estrecharla con su mano derecha. -Harry Styles, un gusto.

22 de mayo del 2015, actualidad. Doncaster, Inglaterra.

Es inevitable para Harry volver a recordar el día en que conoció a Louis, su primer amor platónico. Suspira en su silla mientras vuelve a tomar su bolígrafo y abre nuevamente su cuaderno, anotando otra cosa más a su manual de auto-ayuda.

Oh, y un consejo: si por una extraña razón conoces a ese chico cuando ambos chocan sus libros en plan película romántica, pareja perfecta, mansión en New York y dos hijos... te aconsejo que corras, porque será más difícil olvidar a esa persona.

Te lo aseguro.

¡Hola! Muchas gracias por el apoyo a esta nueva fanfic mía, la cual trataré de actualizarla a diario.

He visto que muchos compararon o pensaron que esto era una adaptación de la fic "Manual para olvidar a Luke Hemmings" la cual solo tienen algo en común: ambos personajes escriben un manual para olvidarse de un chico. Pero, si leen esa fic con esta, verán que el desarrollo de esta fic y aquella es completamente diferente, por lo que pido que no comparen. Por favor, no quiero tener problemas de supuesto plagio y demás.

Si quieres un capítulo dedicado ¡Pídelo!

Oh, y la narración siempre será la misma: Harry escribirá sus pasos y luego se dirá la razón del porqué él escribió ese paso.

Manual para olvidar a Louis Tomlinson ⏩larry au. [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora