El Árbol Tepe

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-¡Adiós! Gracias por traernos-gritó Alebrije. ¿Saben que adoro de Egipto? Las hamburguesas de camello.
-No estamos de vacaciones Alebrije, nuestra misión es hallar a Godofredo. ¡Andando!-dijo Leo comenzando a caminar.

-¡Ah, los mercaderes!, los marinos, la naturaleza.-dijo Don Andrés-Ya ene estoy encariñando con el lugar.
-Si, es digamos...pintoresco-Dijo Teodora
-Uy, uy, uy. ¿Podemos comprar cositas? ¡Por favor!-dijo Alebrije
-Siempre es buen momento para ir de compras-dijo Teodora
-¡Oigan! No vinimos a comprar recuerditos-dijiste
-No donde sabemos que Godofredo desapareció. Lo vieron por última vez en un puesto de la jungla.
-¿Como sabes que está aquí?-preguntaste
-Dejó un portafolios-respondió Leo-Ahi están todos sus planes. Me lo dio Marcela.
-Si pero...¿confías en ella?-preguntaste

Leo parecía tener un tipo de flash back.

-No digo que confié en ella, pero no tenemos otra opción.
-Si, tomar la decisión no es tu fuerte.-dijiste

Se acercaron a una señora.

-Disculpe señora, buscamos el puesto dos de la selva-dice Leo

La señora, con miedo, apuntó a la jungla. Hizo una imitación de un monstruo y luego cayó como si se hubiera desmayado.

-Gracias-dijiste nerviosa.
-¡Mímica! ¡Si!-gritó Alebrije-Mírenme estoy en una caja-dijo imitando estar en una caja.
-Según esas indicaciones. ¿Te parece buena idea perdernos en la jungla?-preguntaste nerviosa.
-Nah, estaremos bien. Porque la hermandad me dio algo especial-dijo Leo-Este gran morral-dijo apareciendo una mochila.-Hay de todo aquí...machetes, una cuerda, un gancho...hasta un palillo.-dijo. Don Andrés se lo quitó y se limpió los dientes.
-Que impresionante instrumento, la higiene oral siempre es importante.
-Y hacer la cuerda es lo que mejor me sale-dijo Alebrije
-La aldeana hizo una advertencia muy clara. No creo que tú mochilita ayude-dijo Teodora
-Concuerdo con Teo-dijiste.
-Lo siento, pero mi magnífico morral es una herramienta clave para nuestra misión.-dijo orgulloso
-Como digas-dijo Teodora. Mientras golpeaba ligeramente a Leo con uno de sus pies.
-¡Oye! Yo necesito a Godofredo. Y punto.-dijo
-Vamos a encontrarlo...¿está bien?-dijiste

......

-Esta selva es en verdad preciosa-dijiste mirando los árboles.
-Como tu...-susurro Leo. Pero lograste escucharlo.
-¿Que dijiste?-preguntaste sonrojada.
-N-Nada-dijo Leo.
-Oye, botánico.-Dijo Teodora refiriéndose a Leo-¿Sabes porque Godofredo se moría por hablar contigo?-preguntó
-No...él y yo hablábamos de muchas cosas.
-Le preguntaremos cuando aparezca-dijiste mirando a Teodroa. Le sonreíste y ella igual.-¿Tenía que ver con la hermandad?-preguntaste
-Leo...¿no te parece extraño que el Hermano Magoffan, apareciera cuando capturamos al genio?
-No-dijo el-Fue con Marcela a ayudarnos. La hermandad nos estaba cuidando. Somos el mejor equipo caza-monstruos-dijo
-Claro...-dijo Teo-Solo digo que debemos tener cuidado, con ellos y en este lugar.

.....

Llegaron a un pueblo pequeño. Pero las casas estaban destrozadas y algunas incendiadas.

-Hola, ¿hay alguien aquí?-dijo Leo
-Siento qué pasó algo súper intenso aquí.
-¡Como una fiesta!-dijo Alebrije-Quizás, había Lémures
-Los Lémures no tienen garras tan grandes-dijo Don Andres

Estabas caminando algo adelante, cuando encontraste una hoja rota. Pero tenia algo escrito.

-¡Chicos!-los llamaste. Leo corrió hacia ti.
-¿Que ocurre?-dijo
-Es....la letra de Godofredo.-dijiste-Pero...no se entiende nada
-¡Miren!-dijo Don Andrés

Había huellas.

-Hay unas huellas marcadas-dijo
-¡Sigámoslas!-dijo Leo
-!Oye! Yo no las pienso seguir-dijiste
-Yo tampoco-dijo Teodora.

Las Leyendas •Leo y Tú• (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora