Las Leyendas •Leo y Tú• (En edición)

Atlantes

Cayeron en Tula.

Leo salió del túnel transportador.

-Aún no me acostumbro a estos aterrizajes.
-Es una suerte que la hermandad no tenga tecnología de rastreo.-dijo Teodora, mientras salía del túnel.
-Y, ¿donde está el artefacto ese?-dijiste
-¿Creen que brille?-dijo Alebrije
-¡A la pirámide! ¡Es la construcción más segura!-dijo Don Andrés

Comenzaron a subir las escaleras.

-Más rápido amigos.
-Para ti....es fácil, nosotros no....flotamos-dijiste cansada
-Empiezo a odiar el pasado-dijo Teodora
-Solo unos escalones más.-dijo Leo-Ya casi llegamos.

Al fin llegaron a la cima.

-Por fin...la pirámide del sol-dijo Don Andrés-No hay tiempo para turistear, ¡adelante!
-Danos un segundo....necesito descansar.-dijo Alebrije
-No podemos descansar, el futuro del mundo está en juego. Mis descendientes corren peligro.
-Todos los corren, Don Andrés-dijiste
-Si Coyolxauhqui destruye el futuro, todos los que conozco morirán-dijo Teodora
-Eso no pasará-dijo Leo. Teodora asintió.
-Debemos hallar el artefacto-dijiste
-¡Mi turno!-dijo Teodora sacando su teléfono. Pero este no tenía batería-Esperen...¡no! ¡No te atrevas! ¡No! ¡Ahora no!
-¿Que pasa?-dijo Leo
-Se murió mi caja mágica. No puedo hacer nada sin ella. No podré ayudar...
-Teodora cálmate, los pobladores nos dirán a donde ir.-dijo Leo. Pero no había nadie.

Leo comenzó a asomarse. Igual que tú. Era muy extraño que un pueblo no estuviera habitado.

-Ustedes diviértanse-dijo Alebrije-Yo estaré por acá tomando una bien merecida siesta-se acosto en una rara estatua.

Luego está bajo su cabeza. La mitad del piso se empezó a inclinar.

-¡Demasiado descanso!-gritó Alebrije. Los empujó a ti, a Leo y a Teodora, dentro de la pirámide.

-Oigan...me dejaron solito allá arriba-dijo Don Andrés
-Nadie entre en pánico. Igual debíamos entrar.-dijo Leo

Era un lugar muy grande. Con demasiadas escaleras y túneles. Estaba pintado de azul.

-¿Quien decoró el lugar?-dijo Teodora-Si es chatarra, ¿para que colgarla?
-¿Serán instrumentos de tortura?-dijo Don Andrés
-¿O medidas de seguridad?-dijiste
-Sea como sea, no se acerquen mucho-dijo Don Andrés

Avanzaron hacia Leo.

-Una de estas escaleras nos debe llevar al artefacto.-dijo Leo
-Leo....tal vez no sea tan sencillo-dijiste. Apuntaste hacia arriba, había escaleras que daban a otras. Haciendo menos visible el final de las escaleras.
-¿Que pasa con este lugar?-dijo Teodora
-Godofredo no explica mucho en su diario.-dijo Leo-Solo que el artefacto....está protegido por...Los Atlantes, Guerreros antiguos atrapados en esta pirámide.

Empezaron a resonar pisadas por toda la pirámide.

-Sean lo que sean....sus zapatos son talla grande-dijo Teodora

Todos hicieron un circulo. Tomaste la mano de Leo por miedo. El té puso atrás de él y puso un brazo en frente de ti. Como si te estuviera protegiendo de algo.

De pronto, las pisadas dejaron de sonar.

-No hay nada-dijo Leo-Tal vez...-la pared se rompió. Ustedes corrieron.

Era uno de los atlantes.

-Soy un fantasma, ¡pero tengo miedo!-dijo Don Andrés