Tal vez otros no encuentren esto ni lo más remotamente gracioso, pero si lo es.
Mis poderes me permiten sanar a las personas, acabo de decirle 'enfermo' a forma de insulto, pero no puedo curar nada en él.
Estoy mirándolo justo a los ojos, una parte de mi espera que él se sienta mal por haberme golpeado.
Tal parece que esa fue su intención.
-Déjeme ir-. Le digo con voz firme.
Sacude la cabeza.
-No lo creo, princesa-. Me recorre de arriba a abajo con la mirada y sonríe.- Planeo divertirme contigo esta noche.
Ok. No soy idiota. Sé lo que eso significa.
Lo que no sé: Qué hacer al respecto.
Estoy perdida.
- Quítate.
Oigo un ruido y cierro los ojos.
Cuando los abro veo que él ya no está encima mío, sino que está en el piso y frente a mi está un niño de unos doce años.
- ¿ Está bien?
Su cara es angelical.
Tiene la nariz respingona y unos grandes... y extrañamente familiares ojos.
-¿Está bien?
-¿Uh?-. Sé que dijo, es solo que no se que responder. Hago un chequeo interno; todo parece estar bien, a excepción de la mejilla, pero habrá desaparecido por la mañana.
El niño me observa.
-Estoy bien. Solo me lastimó la mejilla.
-Oh... ¿Quieres que te traiga hielo o algo?
-No, no es necesario-. Le ofrezco una sonrisa amable y el parece relajarse un poco.- Creo que iré a dormir.
-Que descanse-. Hace una pausa y me mira dudoso.- mmm señorita?
-Si?
-No olvide colocar seguro a la puerta.
Le doy una sonrisa, asiento y entro en mi habitación.
Resumen del primer día:...espero que el "borracho" se vaya durante la noche.

ESTÁS LEYENDO
Healer
RomantikEn Zembrock todo se ha vuelto corrupción y ambición. Hasta los corazones más puros se ven endurecidos por la maldad que los rodea. Para Ambrose el tiempo se acaba. Tiene un objetivo claro, aunque no es el más honroso. Todas las healers al perder su...