Lo primero que veo al despertarme son los, muy asustados, ojos de Gus.
Para los que pensaron: "Caramba, pesadillas de nuevo"
Los felicito, correcto.
Para los que no tienen la menor idea... Por favor, lean el capitulo 4.
Dejando eso claro, regresemos a los ojos asustados de Gus.
"¿Qué tan seguido tienes estas pesadillas?". Por más ilógico que suene, quiero llorar, en este mismísimo instante. Sé que eso solo asustaría a Gus, así que aguanto el nudo en la garganta un poco más y le respondo de forma tranquila, "No es muy común". Eso es, claramente, una mentira.
En sus ojos puedo ver que él sabe la verdad, pero no dice nada.
Me siento en la cama y miro alrededor, es una habitación clara. Me recuerda un poco a mi habitación en Diinlev.
Cuando llegué era demasiado joven para decidir como quería que fuera mi habitación, (sólo se puede escoger una vez) y la directiva decidió no decorarlo hasta que tuviera suficiente edad para decidir.
Ahora que lo pienso es gracioso. Quieren que seas tengas por lo menos 10 años para decidir la decoración de tu habitación y, sin embargo, apenas pueden te ofrecen al dirigente "más adecuado", osea al que más dinero ha pagado.
Un suave golpe en la puerta me saca de mis pensamientos.
Gus se levanta y abre la puerta con cuidado.
Me complace informar que mi amigo de anoche no sigue en el piso.

ESTÁS LEYENDO
Healer
RomansaEn Zembrock todo se ha vuelto corrupción y ambición. Hasta los corazones más puros se ven endurecidos por la maldad que los rodea. Para Ambrose el tiempo se acaba. Tiene un objetivo claro, aunque no es el más honroso. Todas las healers al perder su...