||Crygi|| Labios rojos, como frutsi de cereza.

capítulo #1

P.O.V Gigi.

Era una fría mañana en Tamaulipas, afortunadamente hacía frío, era raro, casi siempre hace calor...bueno.

Me presento, soy Gigi Goodetierrez, hace unas semanas vivía con mis tíos ricos en L.A, era la vida perfecta, lamentablemente mis padres no pensaban lo mismo, aunque es extraño debido a que acá las posibilidades de educación son mucho más bajas en calidad y tiempo.

En lo que estábamos, estaba frío en la mañana, ya me habían llevado a la escuela anteriormente a entregar mis papeles y a que me inscribieran, no estaba tan mal, de hecho, parecía...una escuela común y corriente; Me había puesto el uniforme, y una chamarra afelpada por encima, porque todavía no habían comprado el suéter oficial. Tomé mi mochila y empecé a caminar hacia la escuela, estaba bastante cerca, también veía a una que otra persona en su camino hacia allá, pero para extrañeza mía, eran bastante pocas, unas cinco, quizás.

Llegué y me acerqué al portón, no habían abierto todavía, pensé que abrirían a las 6:30a.m., eso me habían dicho...

Me recargué en el portón y una chica me empezó a hablar, se veía asiática, aunque...raramente asiática, aunque parecía amigable.

—¡Hola! ¿Te puedo pedir la hora?

Dijo la chica, sonriéndome dulcemente.

—Ah, por supuesto.

Dije, para luego sacar mi teléfono y notar que eran las 6:33a.m.

—Son las 6:33a.m.

—Muchas gracias...¡oh!

Dijo, soltando un suspiro de sorpresa, confundiendome debido a que miraba mucho mi teléfono.

—Ese teléfono se ve muy caro ¿Cuál es?

—iPhone SE.

Ví como la chica se quedó con cara de sorpresa, me parecía algo exagerado porque no es como si fuera pobre para no comprarse uno...

—Wooow...tienes dinero.

—Hah, no shit, Sherlock.

—...¿Que dijiste?

Dijo, confundida.

—No shit, Sherlock.

—Osea, si ¿Pero que significa?

—Ah...es algo en inglés...mira, ya van a abrir.

Para esto, el portero de la escuela nos apartó y abrió el portón, dejándonos entrar, aún no tocaba el timbre para empezar las clases, así que me quedé a conversar con la chica.

—¿Desde cuándo estudias aquí?

Dije, mientras caminábamos hacia un banco cercano del patio para luego sentarnos ambas.

—Desde que entré a la prepa, realmente...¿Cómo te llamas? por cierto, eres nueva.

—Oh, me llamo Gigi, Gigi Goodetierrez.