Solo para mí. [Darkar x Mecoboy]

El sin respeto.

Ahí estaban, Mecoboy con su mirada retadora y un tanto enojado, Darkar solo compartía su enojo, seguía un tanto indispuesto, después de todo, no le creía lo que había dicho acerca de sus sentimientos y la verdad era comprensible, tomando en cuenta que el albino estaba de urgido.

Después de algunos minutos de silencio ante el último diálogo del de mayor edad, este mismo se hartó de la espera, iban a coger Si o Si.

- ¡¿Que pinches esperas?!.- Cuestionó el albino a el menor teniendo su ceño fruncido.

- Pues que me desates, pendejo.- Respondió Darkar con obviedad, sonrojando al mayor que tartamudeo un poco al afirmar.

Mecoboy quitó la ropa que aprisionaba las muñecas y tobillos del moreno, este al ser liberado solo sobó un poco las partes anteriormente aprisionadas para luego terminar de quitarse el pantalón, quedando con su camisa verde y solo sus boxers.

Después de unos segundos, Darkar decidió iniciar manteniendo un solo pensamiento en su cabeza. "No es personal", se repetía una y otra vez mientras quitaba la toalla que aún llevaba Meco en la cintura, colocandolo en su regazo para después acercar sus labios a los de este, titubeante.

Comenzó un beso cualquiera, Darkar intentaba restarle importancia al no ponerle muchas ganas y a Meco le estaba calando aquello, sentía aquel beso vacío, ni siquiera un poco de lujuria en este.

Molesto y aprovechando la posición en la que estaban, comenzó a rozar su trasero con el miembro semi-erecto del menor, además de mantener sus brazos inquietos, tocando por encima de la ropa.

Darkar poco a poco se sumergía en el ambiente, aún seguía dolido sin duda pero de cierta forma ansiaba aquella situación. ¿Cuántas veces no había fantaseado con Meco? Aunque en ese instante no era completamente como había soñado, pensando que después de algunas citas podrían comenzar con el sexo lo que les ayudaría a progresar, pero no.

Estaba ahí, pensando que sería momentáneo y Meco volvería a salir con demás chicas, como si el no existiera. Intentó dejar de pensar en todo eso y enfocarse en el beso, finalmente decidió introducir su lengua en la boca ajena, mordiendo suavemente el labio inferior del de ojos rosados, ganando un pequeño suspiro ante eso y dandole pase a sus intenciones.

Sus lenguas jugueteaban entre si, peleando por el control de aquel fogozo beso. Lastimosamente la falta de aire se hizo presente y se tuvieron que separar, dejando un hilo fino de saliva aún uniendolos, sin embargo, Darkar decidió romperlo y pasar del primer beso para bajar sus labios al cuello del mayor, comenzando a repartir suaves besos en este, de forma sensual.

Mecoboy mordió su labio inferior al sentir una ligera mordida en esa zona tan sensible, sintiendo sus ganas de coger aumentar de golpe. Joder, solo quería que le empujara y se lo metiera, ¿Tan difícil era eso?.

Darkar por otro lado, seguía luchando contra los roces que hacía Meco, intentando enfocarse en su labor de marcar una que otra vez al albino, y por su color de piel era aún más fácil. Después de un rato llegó a cierto punto dónde el de ojos rosados incluso daba pequeños brincos encima de su duro miembro, como si quisiera meterselo con todo y boxer, el moreno ya desesperado tomó sus caderas, deteniendolo.

- Si no quieres que lo meta en este instante deja de moverte así... - Demandó cerca de su oído, provocando que el albino sintiera su piel erizarse, aumentando su excitación.

Al ya haber aclarado eso, el castaño alzó un poco al mayor, claro, sin quitarlo de su regazo. En esa posición solo inició acercando su boca a uno de los rosados pezones del albino, chupandolos con delicadeza, disfrutando de los jadeos que soltaba Mecoboy.