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FLASHBACK

Emelia entro a la cocina con una gran mueca en su rostro, junto a Katherine, colocando sus ojos en blanco por el comportamiento infantil de su hermana pequeña y por Harry riendo tranquilamente de sus bromas. Harry casi siempre se encontraba en la casa de la familia de los Parisi; de hecho, el ha tenido una habitación extra que se la dieron específicamente a él. Harry generalmente estudiaba con Katherine, hasta que sus padres lo llamaban.

"Emelia, ¿que está mal amor?", Claire pregunto mientras le tendió los brazos con un ligero mohín, probablemente imitando la expresión facial de su hija.

"La señora Carraway me dijo que era la encargada de hacer galletas para la clase, pero Katherine no quiere ayudarme a hornear", dijo Emelia envolviendo sus brazos alrededor de su mamá y enterrando su rostro en el hombro de Claire.

Claire suspiro, "Katherine, ¿por qué no quieres ayudar a tu hermana hacer galletas?"

Katherine se burlo: "Porque ese no es mi problema, yo no le dije que se hiciera voluntaria, para algo que no puede hacer ella misma"

Claire le dio una mirada a Katherine y aliso el cabello de Emelia. Harry se puso de pie junto a Katherine, apoyando los codos sobre el mostrador. Era típico ver a las dos discutiendo constantemente, pero Harry sintió que Emelia nunca tuvo la culpa que Katherine fuera una adolescente irritable que no le gustaran los niños. En contraste con la dureza de Katherine, Harry trataba de ser amable con Emelia. No es que fuera fácil; Harry realmente disfruto de la presencia de Emelia.

"Clarie, puedo hacer galletas para ella, tengo que hornear galletas para el club de lectoras de la abuela de todos modos", Harry dijo, lo que hizo que Katherine lo mirara.

Los ojos de Claire se iluminaron. "Harry eso sería maravilloso. Yo no tengo el tiempo para hornear"

Harry sonrió, "No es ningún problema, en lo absoluto"

La sonrisa de Emelia no podía ser más amplia.

"Ahora, ¿en la escuela te dieron una hoja, en cuanto a que sabores se les permite llevar a clase?". Pregunto Harry, mientras la sentó en el mostrador de la cocina de su padre. Harry llevo a Emelia a su casa, para que el proceso de hornear fuera mas fácil, ya que el sabia en donde se encontraban los ingredientes para hornear galletas.

Emelia se encogió de hombros y señalo su pequeña mochila. Harry se rio entre dientes mientras tomaba su mochila y saco una hoja que decía 'pautas para hornear'.

"Aquí dice, que solo pueden tener chispas de chocolate, M&M o pasas. ¿Cuál te gustaría mas, cariño?", Harry termino de leer el papel que saco de su mochila.

"Chispas de chocolate", dijo Emelia, balanceando sus piernas de atrás, hacia adelante. Su nariz estaba arrugada, por la mención de las pasas.

Harry le sonrió y le pregunto si quería lamer la cuchara, luego de que la mezcla se encontrara preparada. Ella asintió de inmediato, mientras sus ojos grises se iluminaban, mientras que sus dos trenzas francesas se balanceaban mientras ella asentía con su cabeza. Harry sabia que cuando una persona comía mucha mezcla cruda, era malo, así que él y Emelia acordaron que ella solo obtendría la cuchara.

Ella entrego la cuchara impecable. Harry le sonrió, mientras esperaban que las galletas se hornearan. La levanto y comenzaron correr alrededor de la casa con ambas risas fusionándose.

Jugaron unas seis veces tic-tac-toe y comieron todos los dulces que se encontraban en la casa. Harry incluso le dejo ver en donde tenía su alijo de dulces y galletas. Harry jugo al gato y al ratón con ella, unas cuatro veces.

"Gotcha, amor", Harry susurro, mientras que se agacho al tamaño de Amelia, encontrando su escondite detrás de una maceta en el patio trasero. Emelia rio, mientras Harry la cogió en brazos y le beso la mejilla.

"Eso no es justo, Harry", dijo Emelia en un puchero, para luego apoyar su cabeza en el hombro de él.

"¿Como así, amor?", Harry dijo, mientras caminaba hacia el interior de la casa. Asegurándose de cerrar bien la puerta, para que Emelia no tuviera frio.

"Eres mayor y por eso conoces todos los escondites de la casa"

"No todos"

"No te creo"

Harry le sonrió a la niña en sus brazos. Su amor por ella era completamente inocente y puro. La amaba desde el momento en el que la sostuvo en sus brazos, en el hospital. Su amor por ella no era pervertido y tampoco estaba fuera de lugar. La amaba con todo su corazón, desde un principio.

[N/A] - Nota autora

Solo quería dejar claro que mi historia no va a ser como la historia  'lolita'  - de como Harry se enamora de Emelia debido a su aspecto- (Para aquellos ustedes que leen mi libro pensando que será como lolita, no es así)

Harry no es su padre y no tienen algún vinculo familiar, en lo absoluto. El comienzo del libro estará lleno de recuerdos y luego se narrara la actualidad. Y su amor por ella no es en ningún momento pervertido, cuando es joven.

french braidsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora