Mi Nueva Vida

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Esa vez fue la primera y última vez que vería a Richard en esa epoca, a pesar de eso no me importaba en lo más mínimo, pues aunque lo admiraba y me quede con ansias de aprender más de él; la luz y refugio de mi alma regresaba en unos días, eso hacia qué estuviera siempre muy ansiosa y feliz, así pude hacer sin problema cada escena qué me pidieran, al fin y al cabo solo obtuve un par de diálogos y apariciones en escena, me miraban con ternura, pues escuchaban qué aquella pequeña de 16 años había comenzado la carrera y ahora estaba embarazada.

Supe que no tardaría demasiado para que corriera y se esparciera el rumor de mi embarazo, me daba lo mismo que pensaran de mi en aquel lugar pues aun no tenia un nombre, ni una posición social conocida, pero en cambio yo cada vez más me preocupaba por Stan, pues su imagen quedaría manchada a nadie le gusta un actor casado con niñas precoces de 16 años, así que aunque amaba demasiado tenerlo cerca, no quería que se exhibiera con alguien como yo, o al menos no por el momento.

Para evitar que se le viera entrar y salir de manera un poco sospechosa del instituto, extendimos un permiso para sacarme del lugar, falsifique la firma de mi madre y la solicitud fue aceptada, así que con casi 4 meses de embarazo me iba a vivir con el que sería mi esposo.

Su casa no era muy grande, Stan apenas se iba haciendo de un nombre en ese medio así que en realidad no esperaba una extravagante mansión. Tenia dos pisos, era blanca y con dos ventanas arriba y dos abajo, aproximadamente la casa abarcaba un lote y medio, con un pequeño patio en su frente qué le daba un toque de elegancia, el coche lo dejaba afuera pues no tenia lugar para un garage, al entrar todo era limpio, no podría ser lo que esperarías de un hombre a decir verdad, así que quede sorprendida, tenia todos los muebles  necesarios aunque sencillos, sillón, comedor, cocina, television, baño en la parte de arriba, junto con un cuarto de visitas y uno de huéspedes; asi fuera la casa más grande esta no se sentiría un hogar si Stan no estuviera ahí.

Una noche mientras veíamos la televisión le dije

- Mi amor creo que deberíamos decírselo a mis padres

- Si estas preparada para eso, para mi es un gusto que me puedas presentar - me dijo y me acarició mi vientre

- Ahora serás la madre de mis hijos y no quiero que seas un secreto para nadie - me dijo

Entonces me levante y le dije lo que me había estado dando vueltas en la cabeza toda la mañana.

- No quiero que tu reputación sea manchada por algo colo esto - me miro extrañado y soltó un pequeño suspiro

- De verdad crees que me importa algo así mi amor - se levantó y me abrazo poniendose detrás de mi y besando mi cuello siguió - es un privilegio estar a tu lado no sabes cuanto tiempo espere para estar los dos juntos

- De verdad gracias por estar a mi lado no se que haría sin ti Stan, además quiero decirle a mis padres qué me den la bendición de casarme contigo - dirigí su mano de mis hombros a mi barriga un poco abultada.

- Claro que si - acariciando de arriba a abajo me dijo - no sabes cuanto te amo

Volví la cabeza hacia atrás y le di un suave beso en los labios. Sus manos qué estaban en mi vientre comenzaron a apretar mis senos, después de todo teníamos 3 meses sin vernos, yo también tenía tantas ganas como el, apesar de estar embarazada, estaba muy excitada

Así que el detrás mio lleno de besos cada vez más apasionados mi cuello, subió mi playera y me la saco rápidamente, no llevaba sostén pues asi me sentía más cómoda, así que sin qué nada se lo impidiera dibujo círculos y pellizcaba un poco mis pezones

- Estas seguro de que esto está bien? - pregunte dejando escapar un gemido, pues ya estaba muy excitada por la forma en que me tocaba

- No lo se no quiero dañar al bebé - entonces puse mi mano sobre su short deportivo qué usaba para dormir.

Su pene estaba muy duro y pude ver en su rostro qué no podía contener las ganas de meterlo en mi, así que empujandolo un poco, lo senté en el sofa, le dije que se bajara los pantalones y los boxers, eso hizo, así que me arrodille y tome suavemente su gran ereccion con mis manos; yo ya había tenido sexo antes pero nunca había hecho un oral no tenia la confianza para hacerlo.

Así que pase mi lengua desde sus testículo hasta el glande, eso hizo que se estremeciera un poco, entonces con suavidad puse mis labios en la punta y comencé a meterlo de poco a poco en mi boca cuando ya iba por la mitad,entonces con ayuda de mi mano complete el trabajo llendo de arriba a abajo cada vez más rápido y suscionando y acariciando un poco con mi lengua a lo largo de su pene, después de unos instantes el ya jadeante en su respiración, tomo mi cabeza, me empujó todo dentro de mi, tocando mi garganta, soltó un gemido un poco ruidoso y me aparto un poco aun con él en mi boca, tomo su miembro y jalandolo un poco, se vino sobre mi lengua con pequeños gemidos cortados saliendo de su boca.

Se incorporó un poco y yo trague su semen dirigiendole una mirada traviesa mientras sonreía asombrado, amaba mi tiempo con Stan cada segundo era maravilloso...

Mi propia estrellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora