ஐﻬ. ˙ ˚ ˛ « ¿Alguien algún día será capaz de entenderte? Lo mucho que has sufrido por qué no eres capaz de recordar que eres. Pero quiero creer que no tienes un hueso malo en tu cuerpo. Sé que te estás ahogando en tus miedos.
No sé por qué te escon...
—¡Muchas gracias por la comida! —Tanjirou se despidió con la mano mientras se alejaba junto a Muichirou de la finca. Ya había agradecido por la comida anteriormente, más sentía que era necesario volverlo a hacer por educación. Mantuvo su sonrisa hasta que su mirada se detuvo sobre su acompañante, a comparación de unos minutos atrás se le veía más calmado. Estaba aún preocupado. No le gustaba verlo en ese estado.
Se quedó pensando en que podría hacer para que el pilar de la niebla no volviera a hacer ese gesto y animarle. Parecía perderse en su mundo ya que de un momento a otro no prestaba atención si quiera por donde estaba caminando.
—Tanjirou. —Oh, quizás podría decirle para entrenar cuando estuviera desocupado, aunque eso estaba difícil. Debía pensar en otra cosa. —...Tanjirou.
Sintió una presión sobre su nariz, haciéndole salir de sus planes mentales. Sus ojos buscaron el culpable quedándose congelado al ver como el azabache de puntas menta mantenía su mano sobre su rostro. Una gran vergüenza invadió su cuerpo por distraerse de esa manera.
—Aún sigues reaccionando muy lento. —rió soltando su nariz. —Te estaba hablando.
—L-lo siento. —sobó su piel, le había dado un cosquilleo en todo el rostro. Muichiro pareció no molestarse, le observó para hablar.
—Habrá un entrenamiento en unos días, pensé que sería bueno decírtelo con antelación.
—O-oh. ¡¿En serio?! —agitó sus puños en el aire con emoción.
—Sí, es el entrenamiento de los pilares. —ahora dudaba frió, juro escuchar hablar a alguien sobre eso antes. Ya solo con el nombre sabía que iba a ser difícil. Su ánimo bajo de un segundo a otro. —¿Por qué pones esa cara? Lo harás bien.
—¡N-no es nada! Es solo que...—dejó las palabras a medias, apenas había salido de una batalla en donde por mera suerte ganaron. No quería imaginarse en un entrenamiento de esa magnitud. Otra vez sintió el apretón en su nariz adolorida y se quejó en voz alta.
—Ya deja de preocuparte demás, te voy a estar esperando. —se alejó.
Tanjirou le observó alejarse unos pasos.
—¡Muichiro-san, daré lo mejor que pueda! —dijo para caminar dirección contraria para ir con sus amigos, el mentoso volteo al escuchar sus palabras. Sonrió.
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El entrenamiento de los pilares había comenzado, muchos aspiraban intentarlo para poder llegar al nivel más alto de los cazadores de demonios pero muy pocos lo lograban. Tanjirou estaba motivado para mejorar junto con Zenitsu e Inosuke, más no los había visto en la primera etapa por ningún lado. En parte debía concentrarse si quería avanzar y tenía fe de que en algún momento los encontraría. Además de eso tenía que mantener su estado marcado por mucho más tiempo que antes.
Después de diez días se le dio permiso para ir a la siguiente etapa con Tokito.
Al haber ido a la finca antes le facilitó llegar al salón de entrenamiento, otros cazadores se dirigían al mismo sitio así que no tuvo ningún problema. Cuando logró visualizar el gran espacio se sorprendió al ver la mayoría de los participantes en el suelo completamente agotados. Dio unos pasos para entrar por completo buscando a Muichiro con la mirada hasta que escuchó su voz.
—¡Tanjirou, te estaba esperando! —volteo a su dirección mientras el pilar de la niebla se dirigía a él con una gran sonrisa. Las miradas de confusión de los demás presentes pasaron por alto para el pelirrojo que le sonreía de vuelta.
—¡Tokito-san! ¡Qué alegría verte!
—Qué bueno que ya estés aquí, quería poder ya darte clases para mejorar tu condición física.
—¡Sí! ¿Ya vamos comenzar?
—¡Claro! ¡Esa es la actitud!
Los demás cazadores quedaron boca abierta al ver el gran tiempo que duraban ambos en lanzar el contra ataque cada día en menos tiempo, apenas ellos soportaban unos pocos segundos antes de que Tokito les hiciera retroceder. Ya era el quinto día donde observaron con admiración como Tanjirou mejoraba sus ataques.
Dieron un breve descanso, de tan solo verlos se cansaban y eso que en menos minutos de entrenamiento ya se quedaban tirados en el suelo un buen rato mientras ambos se quedaban de pie como si nada. Esta vez Kamado se sentó en el suelo mientras los demás cazadores rogaban clemencia.
—Eres aún más rápido que la última vez. —Muichiro se quedó a una distancia prudente mientras dejaba su espada de lado y le sonrió.
—¿De-de verdad? —Tanjirou se animó ante sus palabras.
—Sip, tu condición física es perfecta. Puedes ir con el siguiente pilar.
—¿¡Estás seguro?! P-pero, solo fueron cinco días.
—Bueno, hiciste todo tal cual lo dije.
—¿En... Entonces nosotros tambi...? —uno de los cazadores preguntó, más fue interrumpido.
—¿Qué se creen basuras incompetentes? Cuando acaben con ese movimiento, entrenaremos hasta que el área se desmorone. —quedaron helados ante sus palabras. Era obvia la preferencia que tenía el pilar con el pelirrojo.
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Un poquito más cortito que los demás capítulos pero en el siguiente se los recompensaré uvu. Hice ese dibujo inspirándome en el fic ; v ; espero que les guste AYAYAY (༎ຶ⌑༎ຶ) ♡
