Capítulo 6

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Capítulo 6:

-¿Por qué te molestas en ponerte una camiseta si sabes que te la voy a quitar después?-la voz de Luke en mi oído hizo que dejara de restregar la mantequilla sobre las tostadas. Un instante después, sentí sus manos subir por mis caderas y me sonrojé.

-No voy a poder hacerte nunca el desayuno si no me sueltas..-dije con una sonrisa enorme.

-Digamos que me gusta desayunar de otra manera.

-Pues yo quiero jugar a cocinar con tu camiseta.-miré de nuevo hacia las tostadas, y les puse azúcar por encima mientras sentía las manos de Luke meterse por la camiseta que llevaba puesta y acariciar mi vientre. Lo escuché ronrronear en mi oído y solté una risita, dándome la vuelta rápidamente para que me soltara. Dejé las tostadas en la mesa de la cocina y reí, sentándome sobre la encimera, mientras lo veía siguiéndome con la mirada.

-Come.-le dije con una voz risueña. Él sonrió y se sentó para darle un mordisco a una de las tostadas.-¿Por qué me miras así?

-Estaba recordando el hijo de puta con suerte que era.-deslizó su mirada por todo mi cuerpo, parándose en mis piernas, y subiendo de nuevo hacia arriba, donde estaba mi rostro.

Sentí cómo mis mejillas se pusieron rojas, y crucé mis piernas en un gesto de timidez.

Nos quedamos mirándonos mientras él se alimentaba, sin dejar de mirarme con cada mordisco que daba a las tostadas.

Pero entonces, el sonido de mi móvil interrumpió nuestra conversación entre miradas.

-Ahora vuelvo.-dije mientras salía rápida de la cocina, y él asentía con la cabeza, aún con la boca llena.
Corrí hasta la habitación de Luke, y cogí el móvil rápidamente de uno de mis bolsillos, sin mirar quién era.

-¿Hola?-contesté. Me senté en la cama, ajustando la camiseta, antes de recostarme sobre las sábanas.

-Char, ¿dónde estás?-la voz de Ashton hizo que me temblara todo el cuerpo. Lo había engañado. ¿Estábamos saliendo? ¿Qué narices era esto?-Estamos preocupados por ti. Elliot dice que..

-No..-balbuceé.-Ashton, no voy a volver, lo siento.

De repente, la figura de Luke apareció en el marco de la puerta, mirándome sin expresión alguna, y después entró.

-¿Cómo que no vas a volver, Charlotte?-exclamó al otro lado de la línea.-¡Tienes que volver!

-Ashton..-balbuceé de nuevo.-Necesito quedarme por un tiempo.

-¿Ha pasado algo?-lo noté preocupado.-¿Problemas familiares?

-No, Ashton..-Luke se sentó a mi lado, cabizbajo, mientras jugueteaba con sus dedos. Me mordí el labio para no llorar y solté un suspiro.-No.. Yo no soy la mujer para ti. Tengo que irme.

-Charlotte..-murmuró antes de que pulsara la tecla de colgar con el pulgar. Apagué el teléfono y lo lancé al suelo, mientras me liberaba.

Las lágrimas caían por mis ojos tan rápido como si estuvieran competiendo para ver quién llegaba antes hasta el final de mis mejillas, mientras me dedicaba a mirar a un punto fijo.

-Sé lo que se siente.-la voz de Luke se escuchó levemente por la habitación.-Que te dejen, ya sabes. Y me encantaría que estuvieras con él, porque seguramente es un tío mil veces mejor que yo, con un futuro mil veces mejor que el mío pero soy un puto egoísta.

Me quedé en silencio, sin dejar de mirar la pared blanca, y triste, de su habitación. No era capaz de articular ni una sola palabra. Me sentía tan mal por Ashton, por Luke.. por haberlo fastidiado todo.

GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora