Los cuatro jóvenes caminaban por un sendero habitado, no creían que hubiera nada malo, estaban en lo cierto, pero hubo un contratiempo, Will no quería estar en ese sendero por mucho tiempo, le parecía aburrido, decía que no se había alistado en esta aventura para caminar por un sendero tranquilo con gente amigable, así que entro en un bosque que se podía encontrar a unos pocos metros del sendero, Violet al tener la misma idea se fue con él, Ginny y Jake no estaban de acuerdo pero les necesitaban así que los cuatro formando fila horizontal para tener mejor defensa se adentraron en el bosque.
Caminaron tranquilamente no siguiendo un camino marcado sino guiándose entre los árboles, los quales tenían marcas, unas marcas que tenían la forma de un payaso llorando, ignoraron esas marcas hasta que depués de pasar cinco oyeron un ruido los Will preparó la espada, Violet el arco, y Ginny y Jake prepararon su magia, no había nada, no se preocuparon, pero no bajaron la guardia.
Unos minutos más tarde volvieron a ver cinco marcas más, y el ruido volvió.
-És la marca de los caídos, he leído sobre ella, cada cinco marcas se oye un ruido y cuando este se oye tres veces, llegan los caídos, almas en pena que lo único que quieren es un cuerpo.
-Les explicó con certeza Ginny.
-Mira el lío que has montado Will, estúpido.
-Tú apoyaste su idea Violet, tú quisite ir al bosque, ahora seremos cuatro contra posiblimente cientos de almas que quieren un cuerpo.
Discutió Jake.
-Mira, a mí no me vengas con tonterias, si yo digo que es culpa de Will , a y una...
-Cállate, calláos los dos de una vez, no podremos seguir esta aventura si nos llevamos mal.
Les contestó Ginny.
Procuraron no ver ninguna marca más, pero era inevitable, habia unas cien, se toparon con otras cinco y oyeron el último ruido, en aquel instante aparecieron de la nada centenares de hombres, más bien zombies, lo que querían era uno de sus cuerpos para poder vivir.
-Violet tú no podías hacer pociones mortales?
Dijo Ginny.
-Sí pero no puedo hacer una tan potente como para matarlos a todos de una vez, aunque tengo una idea, es una locura, pero es tan locura que podría funcionar.
Les explicó Violet.
-Adelante, no te cortes dinos de que se trata esa locura.
La desfió Jake.
-Vale, cogo mis flechas y la espada y las dagas de Will y las impregno de una poción venenosa y adiós caídos.
Y así lo hizo, tal como les explicó, Violet cogió una poción venenosa y la adquirió en sus flechas y en la espada y dagas de Will, con las armas preparadas ya estaban listos para enfrentar a las almas. Will y Violet desgarraban a sus enemigos que se desintegraban gracias al veneno, Jake y Ginny usaron sus dones Ginny los quemaba, los hacía arder y Jake los ahogaba rodeándoles de agua.
Al final lo consiguieron, derrotaron a todos los caídos y escaparon del bosque al instante.
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El fuego del cielo
FantasyEste libro demuestra como veo yo las cosas, sin realidad. Ginny y Jake són claramente como yo querría ser, con imaginación, fantasía, un mundo así es lo que yo deseo. Es una história sobre dos chicos que demuestran valentía y superación mucha supe...