El fuego del cielo

El brujo negro

Tanto Ginny como Jake sabían de la existencia de la magia negra, una magia oscura con fines nada buenos. 

El anciano que les contó lo del bosque no era quien ellos creían, no era un dulce abuelito con una casa acogedora con rica comida casera.

Los dos muchcachos se quedaron en esa casa unos días. 

El anciano era el brujo más poderoso de todos los tiempos, pero por desgracia era negro, es decir practicaba el arte de la magia negra. Él fue quien les contó a los muchcachos antes de convertir-se otra vez en brujo porque sus padres eran quienes eran. 

La madre de Ginny se enamoró del rey de los fénix en una visita a las montañas ella tenía 16 años y su futuro cónyuge también, se casaron y tubieron una hija, ahora la madre de Ginny yace muerta sin saber que su marido era el rey de los fénix. 

La madre de Jake conoció a su marido en un viaje al campo, ella también tenía 16 años pero el rey de Rangar 20, aun así ella se había enamorado, pero la madre de Jake si que sabía que su marido era el rey de Gandar. 

-Que os parece ya sabéis quienes son vuestros padres y porque los son. 

Dijo el brujo 

-Sí pero Jake y yo nos preguntamos porque lo sabe usted. 

-Porque soy el brujo más poderoso del mundo y lo sé todo sobre mis enemigos, sí fui yo quién los mató y ahora tengo que matar a sus sucesores y a su pueblo. 

El mago lanzó un conjuro contra Darktown convirtiéndolo en un lugar habitado por bestias malignas, realmente malignas. 

A Jake y a Ginny no les importaban esas bestias porque sabían que eran ilusiones pero lo que si les preocupaba era que el brujo los iba a matar.