8.

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—Te lo juro—dijo mientras yo casi me caigo al suelo de la risa. Había decidido acompañarle y llevábamos cuatro horas en el centro comercial de tienda en tienda mientras no dejábamos de reírnos.
—Mira que eres tonto eh—le digo mientras vamos andando hacia la salida.
—Pero estoy bueno—dice subiendo y bajando las cejas.
—Y con el ego por las nubes...—ruedo los ojos.
Estábamos saliendo cuando empezó a chispear.
—¿Cómo has venido?—le pregunto.
—Andando, ¿y tú?—dice.
—Ven conmigo, yo he venido en coche—le digo y empezamos a andar.
—¿¡Ese es tu coche?!—mira asombrado mientras da vueltas alrededor del coche.
—Si jajaja, me gustan mucho los coches y este es mi pequeño—digo acariciando el coche mientras entramos en él.
Josh mira asombrado el coche y yo me río cuando me llega una llamada al móvil.
—¿Diga?—respondo al teléfono.
—Hola Kylie, soy Thomas, el compañero de Alex, he estado investigando y he encontrado algunas cosas que tengo que enseñarte en persona—habla sobre el ataque terrorista.
—Claro, ¿quedamos mañana sobre las seis?—le pregunto y Josh me miraba atento.
—Sí, te espero en la cafetería de la calle Mayor—me responde.
—Perfecto, nos vemos—nos despedimos y colgué el teléfono.
—¿Quién era?—pregunta Josh.
—¿Tanto te interesa?—le digo vacilándole.
—¿Es que no se puede preguntar?—dice Josh y yo le respondo borde.
—Pues no—me aguanto la risa y cuando no podía más, me empecé a reír como una loca.
—Si vieses la cara que has puesto—me reía de Josh.
—¡Idiota!—me coge y me mete debajo de su brazo para revolverme el pelo.
—¡Vale, vale! ¡Ya, para!—intento soltarme pero él es más fuerte que yo.
—Pide perdón—me obliga.
—Nop—le respondo.
—Tú te lo has ganado—dice y sigue destrozándome el pelo. Yo consigo cogerle la mano y retorcérsela para quitarme de encima suya pero el me coge de la cintura con la otra mano para no poder escaparme y cuando levanto mi cabeza, estamos cara a cara, nunca me había fijado en los ojazos que tenía. Después de diez largos segundos, nos separamos y yo me arreglé el pelo.
—¿Qué quieres escuchar?—le digo para no tener un momento incómodo.
—No sé, trap y reggaetón, lo que quieras poner—dice mirando atentamente el coche.
—Tenemos los mismos gustos—río y el se une a mi risa.
Después de media hora de camino y risas, llegamos hasta su casa, más bien mansión, ya sé porqué invitó a tanta gente.
—Bueno, nos vemos en clase—le digo.
—Ayúdame con estas bolsas porfa, y así de paso, conoces a mi familia—me dice sacando algunas bolsas del maletero.
—Josh... Qué vergüenza—le digo antes de entrar.
—No te preocupes, no es nada—dice y pasamos a la gran mansión y vimos aparecer a una mujer de unos cuarenta y tantos años muy bien vestida.
—Hola Josh, ¿quién es esta chica tan guapa? ¿es tu novia?—pregunta acercándose.
—Mamá...—dice Josh mientras rueda los ojos.
—Hola, soy Kylie, una amiga de Josh, encantada—le doy dos besos.
—Un placer guapísima, yo soy Martha, la madre de Josh y este es mi marido John—dice y aparece un hombre detrás suya.
—Encantada—le digo al padre.
—Un gusto conocerte Kylie, eres muy educada, algo que quizás deberías aprender—se dirige a Josh.
—Que sí papa...—dice y empieza a subir escaleras.
—Bueno... Yo solo he venido a traer a Josh así que me voy—les sonrío a los padres.
—Puedes quedarte un rato más querida, nosotros salimos y así puedes vigilarnos a Josh un rato—dice y reímos.
—¡Mamá! Te estoy escuchando—dice y rueda los ojos.
—¿Kylie vienes a mi habitación?—pregunta Josh.
—Vale, un rato—me despido de sus padres y sigo a Josh.
Me estaba quedando boquiabierta con la casa, era súper grande y parecía que estas escaleras no iban a terminar.
—Parece que te gusta mi casa—dice Josh riendo.
—Es impresionante—le respondo.
—Yo más—dice con su ego, ¿nunca se le bajará?
—Lo que tú digas...—terminamos de subir las escaleras y le seguí por un largo pasillo mientras le mandaba a Alex un mensaje sobre lo de quedar mañana con Thomas.
—Y bueno, esta es mi habitación—se encoje de hombros y me deja pasar a mí primero.
—Vaya, qué grande y espaciosa, aunque un poco de orden nunca viene mal—reímos.
—Bueno y ¿tú qué vas a estudiar?—pregunta y se sienta en la cama.
—Como habrás podido comprobar, quiero ser policía, así que estudiaré criminología—digo mientras paseo por la habitación.
—Chica dura, me gusta...—susurra y cree que no lo he escuchado.
—¿El qué?—me hago la sorda.
—No, nada, cosas mías—dice.
—¿Y tú?—le pregunto.
—No lo tengo claro todavía, pero me gusta mucho el deporte y me gustaría hacer algo relacionado con él—dice pensando.
—Guay—le digo.

Después de una hora en casa de Josh, llegué a la mía y cuando abrí, escuché a más personas de las que debería.
—¿Kylie? ¿Eres tú? Ven hija, tenemos visita.
Resulta que eran los padres de Josh y los de Alex, que estaban con mis padres cenando.
Por fin pude tumbarme en mi querida cama y quitarme los zapatos, no tenía ganas de levantarme, encendí una vela de la mesilla de noche y puse música relajante mientras pensaba un rato.
No me había dado cuenta de que ni siquiera le había preguntado a Josh quién era esa chica del centro comercial aunque no me hacía falta saberlo, estas semanas atrás me había dado cuenta de que era un mujeriego y tenía una chica por día.
Después de un rato, cogí el móvil y estuve cotilleando con las chicas y les enseñé mi look para la fiesta, el cuál les encantó, y estuvimos ayudándonos mutuamente para los looks de las chicas.
Me puse una serie y estuve un rato antes de irme a dormir y cuando estaba poniendo la alarma me llegó una notificación.
@_thomass ha comenzado a seguirte.
Era el amigo de Alex y cuándo entré en su perfil mi reacción fue: ¡Wow!
Era guapísimo y era mi prototipo perfecto, alto, moreno, fuerte, y encima ¡policía! No podía pedir nada más.
Les conté todo a las chicas y me ayudaron a escoger mi outfit para ir a verle al día siguiente.

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¡Hola!✨ Siento tardar tanto en subir pero tengo muchísimas cosas qué hacer y no tengo tiempo a parte de que hay veces que no tengo inspiración. ¿Te cae bien Josh? ¿Que crees que pasará con Thomas y Kylie? ¿Qué pasará en la fiesta? Si te gusta no olvides votar💘

𝑃𝑜𝑟 𝑚𝑖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora