capitulo 31

26 1 0
                                    

Accelerator el más fuerte
(parte 1)

Elizabeth se encontraba observando a una hermosa mujer sentada encima de una camilla de hospital mirándola con curiosidad ya que sostenía la mano de una pequeña niña la cual se suponía era su hija.

-Mamá-

La niña chilló y corrió hacia su madre abrazándola con cariño. Elizabeth sonrió y se fijó mejor en la apariencia de la mujer.

Cabello violeta al igual que su hija, ojos negros algo claros, tirando a gris, y una piel pálida. Elizabeth no sabría decir si es porque estaba enferma.

Vestía una bata de pacientes y se veía algo flaca.

-Mira, ella es Elizabeth, se ofreció pagar por tu recuperación-

La niña explicó rápidamente desconcertando a la mujer, que miró a Elizabeth con curiosidad. La albina simplemente levantó la mano en forma de saludo y le brindó una pequeña sonrisa que hizo sonreír a la mayor.

-Hija, por favor, ve fuera así puedo hablar con ella-

La madre pidió y la niña obedientemente se separó y camino hacia Elizabeth.

-Gracias-

-De nada-

Tras ése pequeño intercambio de palabras la niña salió de la habitación cerrando la puerta detrás suya. Elizabeth simplemente se acercó a la mujer y se sentó en un pequeño banco que estaba a un lado de la camilla.

-Por que quieres pagar por alguien que no conoces-

La mujer fue directa. Elizabeth no se sorprendió, de echo, a ella le gustaban las personas que eran directas.

-Tu hija está bastante preocupada, incluso hizo algo para conseguir dinero... si no hubiese estado ahí talvez no la verías nunca más-

Elizabeth explicó sacándole una sonrisa a la mujer.

-Gracias por salvarla, pero no creo que puedas hacer lo mismo por mí-

Elizabeth entendió a que se refería y comenzó a pensar sus opciones.

-Eres una sper o persona normal-

Elizabeth preguntó un tanto esperanzada.

-Soy nivel 1, pero mi habilidad no es muy buena-

La albina frunció el seño, ella no podía curarla con su magia, lo mejor que podía hacer era lanzar una moneda y esperar que caiga del lado correcto.

-Cuanto es la operación-

Elizabeth preguntó sacando una moneda de su bolsillo para mirarla fijamente.

-500.000-

-Apostemos a la suerte, pagaré todo, elija cara o cruz-

Elizabeth pidió preocupando a la mujer.

-Tus padres saben de...-

-Tengo familia, pero yo soy madre-

Elizabeth explicó confundiendo a la mujer.

Diosa entré Spers y MagosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora