AMOR PROHIBIDO

37-A Mí No

Narra Arsa

Hecho mi ropa a la maleta, el helicóptero llegará dentro de treinta minutos, unas mini vacaciones no muy agradables, mi novio es muy celoso y desconfiado, a penas me dejaba sola, literalmente quería que tuviera mis ojos todo el rato puestos en él, es muy guapo y todo pero me saca de quicio.

-Se puede.- golpea la puerta afirmado en ella.

-Ya estás dentro.- pongo mi mano en la cintura.

-Sigues enojada?.- hace cariño en mi rostro.

Desvío la mirada bufando.

-No puedes enojarte por cualquier cosa, sólo le dije a Ian que se veía muy guapo y es como si hubiese cometido el peor pecado.

-Ya perdón.- besa mi cuello.

-Es desagradable que esta situación se repita a cada momento.- lo tomo de la barbilla.

Me abraza dejándome sobre la cama, sonríe sobre mis labios.

-Lo hago porque eres muy hermosa, son justificados mis celos.- baja su boca por mi clavícula.

-Ya hablemos encerio por favor, no podemos resolver esto siempre teniendo relaciones sexuales, la pasamos genial y todo pero hablemos seriamente.- me pongo de pie dejandolo con las ganas.

-Te prometo que no volvera a suceder, ya no seré más así.

-Diez veces me lo has dicho y mira sigues con lo mismo.- hecho mi pelo a un lado.- Me da tristeza esto de saber que tu novio no confía en ti, quizás fue muy precipitado decir que si.

-Estás dejándome.- se apunta con el dedo.

-No dije eso, sólo que fue todo tan rápido que mejor nos hubiésemos conocido un poco antes de esto.

-Me encantas.- junta nuestras bocas.

-Si es así deja de controlar con quien hablo, acaso crees que no me he dado cuenta que revisas mi móvil cuando no estoy cerca del.

-Solo quieres terminar verdad, pues bien, terminemos.- se cruza de brazos.

bro mis ojos como platos, está cortando conmigo, pues bien.

-Si eso quieres entonces esto llega hasta acá, borra mi número, las fotos que tenemos juntos, todo.- me quito un colgante.- Esto también.- se lo entrego.

-Pues toma.- me entrega una pulsera que le había dado.- Que seas feliz, de seguro ya mañana vas a estar revolcandote con otro.

Agarro impulso y le doy una bofetada bien fuerte.

-Jodete cabrón, enamora a una chica que soporte ese carácter de mierda que tienes y buscate a otra pendeja que te baje la fiebre, imbécil.- hablo con enojo.

-Te arrepentirás Arsa.- masajea el lugar del golpe.

Tomo mi maleta refunfuñando hacia el helicóptero, es un completo idiota, no merezco a alguien que me trate así de mal y menos que te revise las cosas, es un inmaduro de pies a cabeza, un verdadero desconfiado. Casi me matan por andar con él, eso me pasa por enamorarme de los primeros ojazos azules que veo, nota mental, no te enamores del estúpido de buen físico y linda sonrisa, quédate con el que vayaa paso a paso.

Me siento al lado de Bella, me abraza sobando mi espalda.

-Así que perreas sola, recién lo vi, lo siento mucho.

Digamos que acabo de poner de estado "yo perreo sola".

-Nunca debí meterme con el hermano de mi amiga, tenías razón, me arrepiento tanto.- coloco mi cabeza en su hombro.

-Todos y todas comentemos locuras por creer en una persona, viene Hakan.- lo observamos.

Pongo audífonos en mis oídos, me distraigo con la música así evito no fijarme en lo que hace.
Llega Justin con Aitana y volamos por los aires a la capital de España.

**
Nos despedimos con los chicos, Ian nos trae a casa.
Arreglo las cosas para volver a clases, plancho mi uniforme dejándolo bien bonito, será difícil no recordar el rostro de nadie, menos mal que este semestre está por acabar quedan pocas evaluaciones que rendir, así descansaré dos semanas de vacaciones y no tendré que verlo en el colegio con su sonrisita de modelo.

Veo que mi teléfono vibra, me acerco para desbloquearlo, es un número desconocido. "Te veo a las 7 en el parque del lado de tu casa".
Pues no se me ocurre quién será.
Arreglo mi maquillaje dándole un toque más brillante, encrespo mis pestañas, alizo mi cabello, me pongo un jeans morado y un poleron gris con mis infaltables zapatillas negras.

Camino por las calles vacías a encontrarme con el misterioso desconocido, observo que no hay nadie, tal vez era una broma.

-Araceli.- habla un sujeto detrás de mí.

Me doy vuelta, no se quién es él, jamás lo he visto.

-Te conozco?.- lo observo, tiene aproximadamente unos cincuenta años.

-Hija soy yo, tú padre.- me abraza.

-Sueltame.- lo empujo.- Madre me dijo que tú estabas sentenciado de por vida en prisión.

-Entonces es verdad que no recuerdas nada cariño, estaba en prisión pero me han soltado, soy libre para comenzar de cero.- sonríe feliz.

-No entiendo nada, por qué estabas encerrado.

-Acusaciones de gente que le caía mal y unas estafas, pero cambié, déjame desmostrate.- toma mis manos.

-A mi no.- se las quito.

-Pero hija.

-Lo siento.- me hecho a correr.

No recuerdo nada de él, es muy raro que alguien que está en cadena perpetua lo dejen libre así como así, algo está ocultando y lo voy a averiguar además tiene un aspecto horrible que da miedo de los cojones.

Siento la necesidad de huir hasta un mirador hermoso de la ciudad a pesar de la contaminación en el aire se rescata la vista. Prendo un cigarrillo tratando de olvidar este día tan sorpresivamente malo.
Tomo mi cabeza, debo recordar absolutamente todo joder, lo bueno y lo peor. Es de suma importancia.

Miro a un chico guapo que viene trotando algo sudado con una botella de agua en la mano, se me hace de rostro familiar, cada vez se acerca más a mi hasta llegar a mi lado, levanta sus cejas cruzando los brazos, sonrío de medio en forma de interrogante.

-Era raro que sintiera la necesidad de venir hasta acá.- se afirma en un árbol.

-Es obvio que me conoces, pero yo a ti lamentablemente no.

-No recuerdas que me amabas, yo como idiota te rechacé, la última vez que estuvimos te traté pésimo, perdón por las amenazas que hice, estaba celoso.

-Genial ahora si que no comprendo, tú eres mayor que yo verdad?.

-Cinco años de diferencia no impidieron que sintieramos amor.- se pone frente a mi y pone mi mano en su corazón.- Late por ti.

-Sabes que eres un desconocido.

-Quizás esto no sea tan desconocido como parece.- se acerca.

-No entiendo.- dejo que continúe.

Toma mi rostro dándome un tierno beso en mis labios, le respondo dejandome llevar, lo siento muy cercano a mi vida, tengo una conexión.

-Yo me tengo que ir.- me despido nerviosa.

Me mira sonriendo mientras me alejo.

Ya no doy más, es suficiente por hoy.

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Que día más intenso!!