4: cartas.

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''Ahí va, escóndete, que no nos vea'' dijo en cuanto la vio pasar, comenzando a disimular que hablaba por teléfono. 


''¿Qué? ¿Quién va?'' habló confundida mirando al chico. 


''¿Ya se fue? Creo que si, menos mal'' 


''¿Quién?'' repitió nuevamente. 


''Lauren'' 


''¿Jauregui?'' el moreno asintió. ''¿La que está con Adam? ¿La popular?'' 


''Que si, ____. No hace falta que menciones todo'' 


''Tenía que estar segura, quizás hay otras Lauren'' rió tomando su mochila. ''¿Qué tienes con ella, Eric? ¿Por qué te escondes?'' 


Eric Jones y ____ Anderson eran mejores amigos desde que tenían memoria, eran inseparables al igual que su familia, debido a que hicieron todo juntos: secundaria, universidad y trabajo. Era lo que le esperaban a los jóvenes, ambos compartían vecindario, su casa frente a la otra. 


''Prométeme que no te reirás'' la señaló con el dedo. 


''Lo prometo'' 


''A ver, cómo explicarlo...'' hizo una mueca mientras seguían caminando. ''Hace unas semanas le estoy enviando cartas, las coloco en su casillero sin que me vea, sé que las recibe porque he visto que las lee, pero nunca tengo una respuesta y tengo el presentimiento de que sabe que soy yo el que las envía, quiero decir, es verdad, pero, bueno, tú sabes'' 


''No diré nada sobre que nunca me lo contaste, pero, ¿qué esperas? Ella tiene novio, obviamente no te responderá'' 


''Ayúdame'' 


''¿En...?''


''Escribirle cartas, no me daré por vencido'' 


''Tienes que respetarla, si no te quiso responder, es porque no tiene interés'' 


Su caminata se detuvo en cuanto llegaron al vecindario. Eric la miró suplicante, y rápidamente de su mochila sacó una carta que era un bollo, arrugada completamente, como si fuera tirado a la basura y se la extendió. 


''Solo léela, ya me dirás que te parece'' 


Y sin más, se marchó a su casa dejándole con la palabra en la boca, la castaña suspiró guardándose la carta en el bolsillo de su chaqueta. Ingresó al interior de su casa directa a su cuarto, dejando sus cosas sobre la cama, entre ellas, la pequeña carta, la cual se quedó mirando un buen rato y optó en tomarla. 


«Hoy te veías linda con ese conjunto deportivo, creo que te hace ver brillante para que lo sepas, podríamos hacer miles de cosas sin él, lo dejaré a tu imaginación, espero tu respuesta»

One shots | Lauren Jauregui y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora