Estragos de un Brillo de Sol

El renacer del fenix

El revivir del fénix

"La restauración comienza"

...

— No puedo creer que vaya a hacer esta locura. —dije en voz alta antes de ejercer mis intenciones hacia esa pintura que parecía no tener sentido en ese mundo.

Fue lo que dije antes de intentar meterme dentro de la pintura que sostenía en mis manos, grande fue mi sorpresa al ver que efectivamente logre atravesar el cuadro, ya no escuchaba las voces de mis padres ni de Wallflowers.

Me encontraba en un lugar oscuro, mis pies se encontraban al aire pues no sentía alguna superficie sólida en la cual apoyarlos, no paso mucho tiempo cuando una luz anaranjada llamó mi atención, cuando me volteé a buscar el origen de esta me encontré frente a un majestuoso fénix alzando vuelo, me quede anonada ante la majestuosidad de la criatura.

— Wow —dije contemplando a la criatura, esta dio un grito aturdidor, su color anaranjado rojizo se volvió de un color azul intenso para después disolverse dejando solo llamas en donde antes se encontraba.

Me acerque a las llamas que quedaron, finalmente sentía que mis pies se apoyaban en algo.

— Asique, tu eres la hija del señor del caos.

Aquellas palabras me tomaron por sorpresa, ¿había alguien más en ese lugar? Al buscar a la persona que se encontraba ahí conmigo, me tope, no solo con una, sino con tres personas frente mío.

— ¿Quiénes son ustedes? —pregunte poniéndome a la defensiva.

— Tranquila —dijo uno de ellos, el cual tenía la piel rosada, era alto y delgado.

— ¡Tranquila! —grite— mira donde estoy parada —señale las llamas— como es que se supone que esté tranquila, no tengo la más mínima idea de qué demonios está pasando aquí.

Uno de los sujetos, más bajito que el anterior, de fisiología regordeta y con un bigote le puso la mano a su compañero.

— Creo que a pesar de que llego hasta aquí, aun no recupera sus recuerdos. —Este hombre tenía la piel rojiza.

— ¿Recuerdos? —pregunté.

Ambos hombres se miraron para después voltear a ver a su tercer compañero, el cual era el más pequeño de todos, él tenía un piel verdosa.

— Okey, si no hay opción —respondió él, para después mirarme— Te dolerá un poco demasiado la cabeza.

— Espera qué...

No me dio tiempo de replicar, el hombre puso sus manos en el suelo, las llamas se elevaron y rodearon mi cuerpo, eso no dolió solo sentí una leve presión a mi alrededor, pero cuando las llamas tocaron mi cabeza no pude contener un grito, sentí que me taladraban el cráneo.

...

Tierra de OOO

Una fuerte explosión sacudió la tierra, y una llamarada enorme sobresalió, todo OOO era testigo de esto.

Adagio palideció.

— Sunset está allá —dijo Starlight al ver la expresión se Adagio, a lo que la chica solo pudo asentir.

— La elemental de fuego cayó —dijo Adagio absorta y sus palabras salieron cual susurro.

— ¿¡Qué quieres decir con eso!? —preguntó Starlight, el tono que usaba la rubia no le agradaba para nada— ¡explícanos de una maldita vez que fue lo que paso cuando te encontraste con Glare!