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Selena

"Deberíamos de ir de nuevo a la casa de Abaad" Dije en voz alta, llevaba varios segundos pensando en esta posibilidad pero no me atrevía a contársela a Jason.

"¿Estás loca?". Murmuró escupiendo la pasta de dientes, acababa de ducharse quedándose con solo una toalla rodeando su cintura, todos sus tatuajes y cicatrices quedaron a la vista de mis curiosos y hambrientos ojos.

Rodeé los ojos y lo miré profundamente.

"No estoy loca, simplemente podríamos ir a dar un vistazo".

"Ve al punto Ángel". Ladró como un perro dóberman.

"Estoy segura que Abaad abandonó el lugar, quiero decir". Pause un momento para subirme a la cómoda del baño. "La vez de la bomba salió corriendo, no me sorprendería que fuera a otro lugar a protegerse, tiene tantos enemigos que es muy riesgoso quedarse ahí, al menos yo lo haría".

"La casa podría estar vacía y si mi hermano está ahí..." lo interrumpí.

"Exactamente, dudo que la casa simplemente se quede vacía, eso sería muy fácil para nosotros pero no es algo que no podamos resolver". Sonreí en su dirección.

"Ahora si estás agradecida que trajese mi arma". Guiño un ojo.

"Dejando de lado que me hayas mentido, si. Si fue una buena idea pues sería estupido de nuestra parte no hacerlo". Me encogí de hombros. Aún me faltaba mucho por descubrir de Jason, ¿por qué estaba tan obsesionando por encontrar a su hermano? ¿Qué pasa por su cabeza? ¿En serio es el psicopata que todos dicen que es?

"Vamos a buscar a mi hermano". De la nada comenzó a hacer todo con rapidez, como si acaba de comprender realmente que nuestro plan puede resultar.

Pero yo nunca dije que podría ser así. Vivimos en un mundo en que las personas no tienen corazón, por todo lo que se, Alex esta muerto desde hace mucho tiempo, me sorprende que Jason aún no haya comprendido eso. Realmente las posibilidades de que este vivo son mínimas, incluso inexistentes.

Por alguna razón no se lo decía, me dolía sacar las palabras de mi boca porque por alguna razón me ponía en sus zapatos, sería imposible que me rindiera tan fácil, quemaría la ciudad para poder encontrarlo pero también se en lo que estoy metida y desde pequeña me hecho a la idea de que las cosas no son pea siempre y que la vida de alguien se puede ir en un segundo.

Jale su mano antes de que pudiera salir de la habitación, lo miré a los ojos profundamente tratando de decirle todo lo que necesitaba escuchar pero jamás estaría dispuesto a aceptar.

"Yo no se si nuestro plan funcione, pero quiero que sepas que cualquier cosa que encontremos hoy en esa casa tendremos venganza por ello. Vengaremos la vida de tu hermano y mi padre".

"Ese cabron esta muerto aunque mi hermano este vivo, Ángel. Es como una mosca molestando y rodeado de mierda, va a pagar por todo lo que que ha hecho, a mi y a ti".

Sonreí levemente y deje que me sacara de esa habitación, no sabía si saldría viva hoy pero siempre tengo ese riesgo, ya estoy acostumbrada.

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La casa estaba vacía, era obvio que iba a estarlo. Abaad iba a hacer todo lo posible por ocultarse y toda la porquería que tenía en esa casa. Drogas, armas, personas, todo.

Jason toco la puerta y después pegó la oreja a ella y espero unos segundos, cuando no escucho nada la abrió por completo. La casa aunque estaba completamente vacía y posiblemente se podría escuchar un alfiler caer al piso, estaba completamente ordenada y se veía normal. Sala, comedor, lo adornaban cuadros y flores, era extraño porque sentía que entraba a la casa de una familia común y corriente.

El silencio era alto y pasivo se podría escuchar un alfiler caer al piso mientras Jason cuidaba el frente yo me encargaba de nuestras espaldas.

De repente una pecera enorme pegada a la cocina con cientos de peces pequeños y coloridos llamo mi atención.

Yo conocía esta casa, yo ya había estado aquí.

Meses antes...

"Ven aquí mi querida Grace" Abaad tomó mi mano y me jalo llevándome hacia la cocina, era grande y blanca, con una isla enorme y de mármol era increíble y si no odiaba tanto cocinar y a este individuo que tengo aún lado podría cocinar algo.

Algo azul llamó la atención de mi ojo, era una pecera enorme con cientos de pequeños peces fosforescentes, que extraño pero eran lindos.

"¡Oh! Ya vi que encontraste mi pecera" Abaad camino hacia ella y colocó una mano sobre ella, luciendo orgulloso de una pecera. ¿Este tipo podría ser más raro? Demonios. "Siempre quise uno de estos cuando era niño pero era muy pobre así que compré cientos ahora" Sonrío.

Comencé a hacer una mueca y rodar mis ojos pero me detuve, tengo que actuar que me interesa y sentir lástima por el así que me acerque a el sonriendo y deje un beso en su mejilla.

"Wow" fue lo único que articule.

Una historia muy conmovedora. Que asco.

"Vamos" tomó mi mano. "Tengo que follarte en cada cuarto de esta casa".

Yuju.

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Me levante cuidadosamente de la cama y sin hacer algún ruido me coloqué una bata tratando de no hacer ruido. Abaad estaba dormido después de haber tenido sexo el hombre estaba cansado y probablemente dormiría por horas y yo como soy joven y llena de energía aproveché para darle un vistazo a la casa.

Saliendo del cuarto de visitas me percaté de un largo pasillo, al fondo estaba oscuro casi negro, tenía que averiguar qué estaba ahí.

Tome mi teléfono y alumbre el camino, se veía un pasillo largo pero no era la ilusión porque este solo daba a unas escaleras.

No se escuchaba nada, no olía a nada ni tampoco alcanzaba a ver mucho. Llegando al último escalafón escuché un golpe. Se escuchó como si algo o alguien fuera aventado contra una puerta, baje por completo las escaleras y me dirigí hacia alla.

"¿Grace?". Brinque por el susto, Abaad se encontraba arriba de las escaleras mirándome confundido. "¿Qué haces aquí?" Preguntó algo enfadado.

Me puse mi máscara de estupida y comencé actuar.

"Lo siento mi amor" Con un puchero comencé a subir de nuevo sin quitarle la mirada de encima. "Solo buscaba más lugares para que tu y yo sigamos haciendo el amor". La última parte la susurré, era experta en controlar mis náuseas enserio.

Tomó mi mano y me llevo de nuevo hacia la parte central de la casa "no vuelvas a pararte ahí, es peligroso para ti".

"Tu hermano está aquí, yo se que está aquí". Dije segura.

Rodé mis ojos cuando se puso de espaldas, yo era más peligrosa para el.

 The Drug Love  | JM & SGWhere stories live. Discover now