Capítulo VIII. "Declaración de guerra"

48 5 0
                                    

Reino de Arendelle.

En el gran salón todos los presentes tenían cara de pesar, el ambiente de tensión aumentaba a la vez que el ministro daba las noticias.

-Berk fue atacada, su alteza. Lo cual podría indicar que tendremos enemigos en diferentes frentes. Y las costas de Kent... - El señor inhaló profundo para seguir. – La costa estaba totalmente congelada.

- ¿Elsa? – Anna preguntó.

-No podré convencerlos de que no fui yo.

-Su majestad... - su consejero esperaba respuesta.

Elsa se dirigió hacía un cuadro familiar, con su mirada perdida.

- ¿Cuántos murieron?

-Calculamos que cerca de cincuenta personas, la mayoría eran comerciantes o navegantes. - Elsa cerró los ojos con fuerza.

- ¿Qué sugiere?

-Dado las circunstancias, sería conveniente negociar con los afectados, enviar ayuda y suministros, pero usted no debe dejar el Reino, no son de fiar. En cambio, deberíamos mandar cartas a Berk y Corona para reafirmar su posición a lado de nosotros y que nos apoyarán. -Ella inhaló profundamente.

- ¿Quién atacó Berk? – el ministro bajó la cabeza.

-Nos informan que fue otra tribu del archipiélago barbárico. Liderados por Drago "mano dura".

-Tenemos ahora tres frentes... Berk tiene encima a Drago y los clanes, por otra parte, nosotros estamos en la cuerda floja con los sajones.

-Su majestad, podemos hacer planes en caso de una invasión o declaración de guerra.

Elsa permaneció unos minutos en silencio.

-Por favor, déjeme sola con mi hermana. - Todos los presentes salieron.

-Elsa. - susurró Anna.

-Anna, si algo me pasa, toma el control del Reino.

-Nada te va a pasar. – tomó sus manos, pero la rubia se separó en dirección a un escritorio.

-Quería mostrarte esto. – abrió el segundo cajón, tomando un paquete de cartas.

-¿Qué es?

-Cartas... se guardan copias de cada carta que es enviada y recibida. Estas eran de nuestro abuelo.

-¿Qué dice? – Anna le quitó una de las cartas y comenzó a leer.

-Nos ayudará a comprender el pasado.

- Espera... ¿El abuelo quería negociar con el Rey Uther Pendragon?, hasta unir relaciones con matrimonios...

- Uther tenía una hermana muchos años menor: Seren Pendragon, murió a los 8 años, por eso nunca se concretó. Nuestro padre desposaría a esa niña cuando el tiempo llegase.

- Aquí también está implícito que el abuelo pedía su apoyo para combatir a personas con magia.

-Exacto, pero Uther se negó. – Calcularon que, para ese entonces, el Rey "cabeza de Dragón", estaría en sus 20 años, mientras sus padres en los 14 años.

- ¿Uther no los odiaba?, ¡Realizó una cacería de brujas!

-Lo sé, pero mira esto. – Elsa buscó entre el montón de papeles. - Uther le escribió a nuestro padre varios años después, pidiendo que reconsiderara la propuesta del abuelo, ahora Uther declaraba guerra a la magia.

-Y nuestro padre se negó...

-Se negó por mí, y por mis poderes. -Elsa sabía que se manifestaron en sus primeros años de vida, y todo encajaba, pues apenas Elsa aprendía a caminar, Arturo había llegado al mundo.  Era sabido por todos lados que eso contó para un nuevo periodo en Camelot, uno sin tolerancia a lo diferente.

Corona Rota [Mericcup & Jelsa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora