Solo para avisarles qué hay posibles spoilers de Harry Potter y que volvi a publicar el capitulopor un error mio, este capitulo era igual al siguiente, pero ahora esta correcto y todo concuerda.
Miro a Seth llegar completamente sudado y agitado, le doy un largo sorbo a mi bebida helada, la compré hace unos minutos, el sol está a todo lo que da y necesitaba refrescarse, al parecer el también. Miro como sacude su cabello.
Su mueca de cansancio es clara en su rostro, se detiene a mi lado, pasando uno de sus brazos por mis hombros, hago una mueca de asco y lo aparto de mí.
— Estas sudado. — le recuerdo. — No me abraces.
— Solo un abrazo. No te cuesta nada. — se vuelve acercar y lo vuelvo a alejar, empujándolo con ambas manos. — Gracias Katherine, eres una buena amiga. — me quedo desconcertada hasta que lo veo. Cuando me abrazo me quito mi bebida. Ruedo los ojos mientras lo miro tomársela. — Necesitaba refrescarme.
Verán, lo rete a que corriera quince cuadras en menos de diez minutos. Al parecer, lo logro. Lo miro, manteniendo las cejas alzadas.
— Parece que eres rápido. — le felicito.
— No parezco rápido, lo soy. — me corrige.
— ¿Estás seguro? Demorarse quince minutos en llegar. — miento. — Además, solo fueron quince cuadras.
— Bien. Ahora serán quince cuadras cargándote, un grado más de dificultad. — No me da tiempo de reaccionar, no me doy cuenta de que me carga como saco de papas hasta que comienza a correr. Conmigo sobre su hombro.
— ¡Bájame Seth! — le pido. — ¡Idiota bájame ya! — da vuelta en una esquina de una manera brusca, dándome mareo al instante. — Qué me bajes. — le digo, golpeando su espalda.
— ¿Eso es lo mejor que tienes Katherine? — Pregunta completamente divertido, idiota. Como él no es cargado como un saco de papas.
— Voy a vomitar. — le advierto. Siento como su cuerpo vibra, está riéndose. — ¿No te importa terminar lleno de vomito? — le pregunto.
— Ya estoy bañado en sudor, además de que pise popo de perro y me callo popo de pájaro ¿Qué es un poco de vomito? — responde y gruño. Me resignó a ser cargada como a un costal.
— ¿Cómo está Clara? — saco un tema de conversación.
— Bien, con un montón de zopencos a los cuales me tengo que encargar de alejar pero bien. — responde.
— Hasta donde sé, ella y Charlotte son muy unidas. — comento. — Clara fue la semana pasada a casa, tenían un trabajo juntas.
— Me alegra escuchar eso, pensé que había salidos con algún... zopenco. — dice. Bueno, tengo algo con que hacerlo enojar.
— Aunque después de una hora fueron al cine. — se detiene en seco. Provocando que mi cara golpe con su espaldas.
— ¿Qué?
— Si. Regresaron muy tarde. — me rio al ver su cara roja. — es broma. Vieron una película en casa, me obligaron a verla con ellas, les encanta el romance.
— ¿Segura? — me baja y casi alabo el piso cuando mis pies lo tocan.
— Sí. Además, ¿Qué tiene de malo que salgan a divertirse? — le pregunta, me señala una banca, invitándome a sentarme. Ambos lo hacemos, ya sin importarme su sudor. Como dijo el, ¿Qué es un poco más de sudor a estas alturas?
— No quiero que cometa los mismos errores que yo, no ella, es mi pequeña hermana menor y no soportaría verla en una situación como esa. — dice en voz baja. Cubriendo su cara con sus manos. Me quedo muda, sin saber que decirle. — Prométeme que no dejaras que tus hermanas sufran por alguien como nosotros. — me pide en un susurro.
ESTÁS LEYENDO
Llegaste Tú
Teen FictionEl pasado regresa de muchas formas y Katherine Evans es la persona correcta para comprobarlo. Él esta roto. Ella también. Él sonríe. Ella no lo hace. Él ríe para ocultar su dolor. Ella se aparta de todos para evitar salir lastimada. Él no busca...