𝐌𝐈𝐋𝐋𝐈𝐎𝐍 𝐃𝐎𝐋𝐋𝐀𝐑 𝐁𝐀𝐁𝐘 ━━━ 𝐬𝐮𝐩𝐞𝐫𝐜𝐨𝐫𝐩

𝓽𝓱𝓻𝓮𝓮

Había estado de pie frente a la puerta por más de diez minutos. Kara estaba ahí, sentada en una de las tantas mesas mientras conversaba con un mesero. Kara había elegido Noonan’s para el almuerzo, Lena no había regresado al sitio desde que se enteró de la renuncia de Kara.

Ahora le daba vergüenza entrar. Tal vez Iris le mencionó a Kara que Lena había asistido más después de que renunció en busca de su sonrisa que iluminaba tanto como el sol. Tal vez Kara supo todo ese tiempo que Lena solo iba al café porque le agradaba su calidez. Y detuvo sus visitas cuando se enteró de que Kara no estaba más ahí. Tal vez Kara pensó que Lena era extraña.

Como sea, Lena sacudió la cabeza, con ello trató de esfumar todos aquellos pensamientos tontos. Era exagerado. Solo iba a ser un almuerzo.

Excepto que Lena no había tenido un almuerzo amistoso en años. No salió a almuerzos, solo a cenas con importantes inversores o comidas elegantes con colegas. De vez en cuando visitó un bar con algún socio. Pero no tuvo almuerzos para preguntar un cómo estás totalmente real, no recordaba la última vez que sintió interés verdadero por alguna salida. Y Kara Danvers definitivamente le interesaba. No quería arruinarlo.

Pero era una Luthor. ¡Lo iba a arruinar!

Respiró profundamente, recordó las palabras de Sam. Solo sé tú misma, Lena. Sí, había llamado a Sam a su oficina después de aquella reunión, en la que de hecho le fue imposible concentrarse porque solo estuvo pensando en que invitó a almorzar a Kara Danvers.

Lena le habló a Sam de Kara, la linda barista que le regalaba sonrisas que le hacían sentir más cálida que el mismo sol. Sam preguntó una vez, una semana después de haber estado asistiendo oficialmente al café con Kara, su directora de finanzas le dio esa sonrisa socarrona mientras se inclinaba en su escritorio preguntando que era lo que le tenía tan feliz.

Y Lena no quiso responder a eso. Se burló, diciendo que estaba siendo ridícula. Pero después soltó que estaba visitando una cafetería donde la barista había sido amable. Sam se burló, preguntando que si se necesitaba a una barista amable para que Lena sonriera, entonces le hubiera invitado a muchas cafeterías desde hace tiempo. Lena continuó hablando de Kara. Y como se conocieron.

La tarde depresiva que pasó cuando se enteró de que toda su familia era sucia. Lex estaba en la cárcel, su madre incluso siguió al lado de él en ese tiempo. Debió esperarlo de su madre, pero no fue así. Y entonces cuando le explotó en la cara, simplemente se hundió en un banco de una calle cualquiera mientras la lluvia caía, recordó también que había estado fumando. Cuando se suponía que estaba olvidado el vicio. Desde entonces, tenía uno casi diario. Solo uno.

Sam se sorprendió un poco cuando Lena confesó que había guardado el paraguas amarillo por si encontraba de nuevo a la chica. Riéndose después de que había sido un acto total de cualquier película romántica. Lena alegó que solo estaba buscando amistad con Kara, porque era un ser brillante. Y estaba totalmente deslumbrada.

Después de eso, Sam entró a su oficina de vez en cuando para preguntar cómo iba con la barista. Solamente para después burlarse de lo inútil que Lena era porque no podía conseguir hablarle a la dulce niña de la que tanto balbuceaba.

Lena se sonrojaba totalmente, repitiendo que no era su culpa que un ser tan perfecto se presentara ante ella con una fila de dientes tan increíbles mientras preguntaba por su día. ¿Qué era eso? Nadie nunca le habló así. No estuvo nunca preparada para esas cosas.

Todavía se sorprendió por haber hablado con tanta fluidez aquel día del primer encuentro. Se debió quizá a que estaba deprimida, en la lluvia, pensando que Kara sería una fotógrafa o algo, se molestó. Y le habló mal. Pero la niña se quedó aún así. Y Lena había estado bebiendo y fumando, quizá también eso había ayudado a encontrar las palabras cuando su sorpresa era gigante.