La primera cosa que pensó Orion Pax al llegar a Kaon fue que nunca había visto nada como eso. Claro que había visto imágenes; pero experimentar el lugar con todos sus sentidos, viviendo la experiencia completa…
Había llegado a Kaon en su forma alterna, rodando por Kalis y cerca del Manantial de AllSparks, fuente de todo cybertroniano viviente. Luego cruzó los estados Torus y entró al Mar de Óxido, con los Cañones Sónicos al sur. Bordeando los Cañones, Orion Pax entró a los Páramos y miró cómo la limpia y civilizada superficie de Cybertron era reemplazada por territorio seco y áspero. Las agujas metálicas y cañones sinuosos llenos hasta el fondo de óxido eran la norma en las ruinas antiguas que brotaban del suelo. Orion Pax sabía que los páramos habían sido testigos de grandes hazañas y momentos extremadamente importantes en la historia de Cybertron, pero nunca había obtenido acceso a los registros que podrían decirle cuáles fueron esas hazañas y momentos. Así que siguió adelante, almacenando toda la información que podía mientras miraba el ambiente a su alrededor.
Antes, él imaginaba que aquello era un área industrial, mas no un terreno baldío. Ahora era difícil verlo como algo más que un residuo muerto de una civilización en decadencia.
Y eso era lo que Orion Pax buscaba cambiar. Juntos, él y Megatron podrían llevar a cabo aquel cambio.
La ciudad de Kaon estaba tendida sobre una meseta de tres veces la superficie de Iacon. Sobre ella colgaba una nube permanente de compuestos metálicos pesados. Mientras la arquitectura de Iacon se dirigía hacia arriba y hacia afuera, definida por torres y arcos y cadenas de rocas que llevaban hacia bloques residenciales y maravillas de la ingeniería, Kaon era todo lo contrario; como un abismo infinito de escombros ennegrecidos , estructuras mecánicas inmensas colapsando unas sobre otras, y nuevas versiones de las mismas estructuras construidas sobre ellas. Parecía como si hubiese sido bombardeada desde el cielo y luego, reconstruida por minicons ciegos. En su forma alterna, Orion Pax retumbaba sobre los bordes de Kaon, regresando a su protoforma al llegar al centro de la ciudad, donde las calles se volvían confusas y superpuestas sobre conductos, pasarelas… era imposible mantenerse orientado sin interface satelital y de la Red. Era imposible ver en Kaon. No había forma de entender dónde estabas en relación al resto de la ciudad. En Iacon existía el sentido del espacio y la ubicación.
¿Cómo sería vivir aquí desde el momento en el que emergías del Manantial de AllSparks?
Ahora caminando, Orion Pax buscó el edificio que Megatron le había descrito. Estaba hacia el sur del centro de Kaon y entre dos pozos de desechos tan profundos que Orion Pax no podía ver el fondo de ellos a menos que caminara hasta el borde. El edificio en sí era un monumento negro con forma de pirámide, cuadrado en la cima para servir como pista de aterrizaje. Adentro habían obras ciber hidráulicas abandonadas, según Megatron. Era el ambiente perfecto para batallas gladiatorias, al igual que para producciones ilegales de ópticos y componentes auditivos, que luego serían vendidas en el mercado negro. Éstas se degradaban rápido en la altamente contaminada atmósfera de Kaon, y especialmente en las arenas gladiatorias, donde las heridas a los componentes sensitivos eran muy comunes en los luchadores sobrevivientes.
Pero era debajo de esos talleres donde la verdadera acción tomaba lugar. A casi medio hic por debajo del nivel de las calles, se interconectaban niveles subterráneos de hogares de trabajadores de apoyo, almacenamiento de materiales y tuberías de refinería que formaban una serie de espacios perfecta para las peleas gladiatorias. Habían más de una docena de lugares como ese en Kaon; veinte más en Slaughter City; y otros más en varios poblados en los páramos y justo al norte de los terminales orientales de los Cañones Sónicos.
Aun así, éste era el corazón de los gladiadores. Todos los cybertronianos luchadores de otros distritos venían aquí a ganarse un nombre – literalmente, como fue el caso de Megatron – y ahora que Megatron había derrocado al sindicato criminal que controlaba los pozos, estaba en el proceso de convertir a los gladiadores en su futuro ejército. Orion Pax se dirigió hasta la pirámide como si ésta guardara el secreto de un Cybertron que él nunca supo que existía.
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Transformers: Exodus (Traducción al español)
Science FictionEn Cybertron, un planeta liderado por las castas, Megatron, un guerrero invicto, da voz a los anhelos silenciosos de las masas oprimidas - y abre la mente de Orion Pax, un insignificante recolector de datos, quien se convertirá en Optimus Prime. Lo...