"Si... a veces extraño mucho esa época... cuando tenía todo lo bueno, y aún así me quejaba..."
Hace mucho tiempo, en un día soleado en la ciudad.
Jovencita de cabello negro: ¡Papá! ¿Me vas a comprar el dulce que te pedí? ¿Si, verdad?
Padre: Si, pero en unos días cuando cobre. Ahorita mismo debemos ser cuidadosos con los gastos.
Jovencita: Ay por favor, si eso no cuesta nada. ¿Qué tanto pueden pesar dos dólares?
Papá: Eventualmente comprenderás el peso de dos dólares, cariño. Por ahora solo seamos pacientes, y tenemos cosas en la casa para hacer galletas. Puedes hacer unas galletas.
Jovencita: Mmm, no suena mal, admito que me convenciste.
"Ahora entiendo lo que pesan dos dólares."
En la casa.
Jovencita: Angel, ¿me puedes pasar el batidor, por favor?
Angel: Si claro, toma.
Jovencita: ¡Por eso es bueno tener un hermano mayor!
Angel: Ja, no te emociones, ¡que luego te cobro todos los favores!
Jovencita: ¡Se supone que debes ayudarme desinteresadamente!
Angel: ¡Se llama justicia, y yo la defiendo! Jajajajaja.
Jovencita: Bla, bla, bla. Ahora ven a batir la mezcla.
Angel: ¿¡Qué!? ¡Pero tú eres la que está haciendo las galletas!
"Es bastante difícil no pensar en eso. Hubiera querido que nuestra última actividad juntos hubiese sido más emotiva."
De vuelta a la ciudad; un día nublado, en un café.
Hombre alto moreno: Ya ha pasado bastante tiempo Carolina.
Carolina: Pues si, y todo lo que pasó después también quedó en el pasado. 8 años pasan volando.
Carolina Martinez, esa hermosa mujer alta y de cabello negro que conocimos en el capítulo anterior. Tiene 24 años, y es estudiante de diseño gráfico. Lamentablemente, está desempleada.
Carolina: Supongo que algunas cosas no se superan nunca. Sin embargo, he logrado avanzar en mi vida, y a pesar de todo sigo esforzándome. Y tú, Fer, ¿cómo vas con el trabajo?
Fernando, el mejor amigo de Carolina. Tiene 23 años y también es estudiante de diseño gráfico. Es un poco más alto que Carolina, moreno, y su cabello es castaño.
Fernando: Hasta el momento bien, aunque no ha sido para nada sencillo. Qué difícil es conseguir un trabajo en el que hagas lo que estás estudiando. No me sorprende que las personas digan que hay carreras que no sirven. Aunque, por supuesto, no tienen razón.
Carolina: Evidentemente. Me gustaría seguir estudiando en la universidad, pero por el momento tendré que seguir aprendiendo por mi cuenta hasta que pueda volver a pagar el semestre.
Fernando: No te preocupes, todo va a estar bien. Puede que cueste conseguir trabajo, pero vamos, esto es la ciudad; siempre hay trabajo, solo hay que buscarlo bien.
Carolina: Si, supongo que tienes razón. Aunque no sé qué hago perdiendo el tiempo, cuando podría estar creando un sistema piramidal.
"Jajajajajajaja"
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La Montaña de la Felicidad
Ficção GeralSumérgete en una apasionante historia sobre dos jóvenes que viven en un pueblo llamado Mistin, rodeado de hermosos valles y montañas, en el cual conocerás la divertida y adorable aventura de estos muchachos y, vivirás junto con ellos momentos "mágic...