Aullidos a la luna

Cuidandote

Lucius abrazo a Draco con fuerza mientras su hijo le apretaba, dolia, su fuerte agarre aplastaba sus heridas y las hacía doler, pero ni muerto lo dice en voz alta. Afortunadamente Remus se dio cuenta de ese hecho y se entrometio.

-Lo vas a asfixiar si lo estrujas tan fuerte- se burló, Draco se rio y soltó a su padre.

-Lo siento- se disculpó débilmente- yo sólo...estoy...feliz de que estén bien.

-Nosotros igual cachorro- le respondió su padre acomodando su cabello, un gesto cariñoso entre ambos.

Narcissa se había quedado con Severus, diciendo que no confiaba que Black estuviese en la misma habitación que Severus totalmente solos.

Los tres lobos estaban cómodamente en la habitación, la mayoría del personal sabía que todos los que estaban en esa habitación no la debían ni temían. Draco contó que le habían llamado para establecer una fecha para el juicio de los 3, era dentro de muy poco, cosa que no le agrado tanto a Remus, apenas le darían tiempo a Lucius para recuperarse, al menos no los llamaban al instante, pero Draco advirtió que convenía no salir de San Mungo en lo que era el juicio, ya que los Aurores y otras autoridades podrían ponerse pesadas.

Remus estuvo al instante de acuerdo, mientras que fue una odisea convencer a Lucius, pues el se negaba a esconderse de un "mago de cuarta que se siente superior por una placa". Finalmente fue Remus quien tuvo la última palabra al decir que no se levantaría de esa camilla hasta que estuvieran sus heridas totalmente cerradas, haciendo el patriarca aceptará a regaña dientes.

-¿Vas a decirme? -preguntó Lucius a Remus, sorprendiendo a este, pues no entendía a que se refería.

-¿Que cosa?

-Su nombre- sólo le bastó ver la cara de Lupin para saber que no tenía idea de a que se refería- El nombre de tu cachorro, Remus, por Merlín.

Draco al instante alzo la cabeza y le volteo a ver, ambos albinos estaban emocionados por saber el nombre de el nuevo integrante de la manada que aún desconocían, si hubieran estado cómo lobos, tanto Lucius cómo Draco estarían con las oreja arriba, ojos bien abiertos y moviendo la cola de lado a lado. A Remus se le iluminaron los ojos, su hijo, cuando lo cargó por primera vez se sintió tan....real, un cariño que jamás creyó tener por nadie más nació en él, ahora podía entender a la perfección lo sobreprotector que Lucius era con Draco.

-Su nombre es Edward Teddy Remus Lupin Tonks- recitó, pero al instante se escucho la risa de Draco y no necesitaba voltear para saber que Lucius estaría aguantandose la risa- Teddy, para abreviar

-Es un lindo mote- acotó Draco cuando terminó de reírse.

-¿Quien eligió el nombre? ¿Tu esposa? -quizo sabre Lucius, aunque a Draco le sonó esa pregunta cómo un pincho de celos, ¿estaría su padre celoso de la metamorfomaga? Se preguntó retóricamente aunque sabía de sobra la respuesta.

-Tonks y yo nos separamos- comentó con soltura, una soltura que sobresalto a Lucius.

-¿Que ustedes dos que?

-Nos separamos, la custodia de Teddy es compartido y, bueno, fue algo mutuo de manera que fue tranquilo.

Lucius tuvo que morderse la lengua para no decir nada al respecto, al menos nada que delatara no innecesariamente feliz que le hacía escuchar aquello y mantenerse en sus cabales para seguir con la platica.

-¿Y cuando lo conoceremos? - preguntó Draco.

-Ya pronto- prometió.

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