Cupido |Shikadai x Inojin| ∆ShikaJin∆

Capítulo 10 |Final|

Hola, he vuelto con el capítulo final del fanfic, perdonen la demooooooraaaa xd pondría excusa pero por ahora solo diré que disfruten el capítulo 💗
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En esta vida cosas inexplicables, el amor es uno de ellos. A veces te hace sentir en las nubes y otras veces solo estás en el piso esperando que ese alguien te levante. ¿Qué es el amor en realidad? Muchos lo pueden definir, pero otros explican que es algo maravilloso y otros atormentador.

No hay gris en el amor.

Por algo cuando nos enamoramos, no lo sabemos hasta que esa persona nos mira y tú piensas "Ey, aquí quiero estar". Tranquilidad y seguridad es lo que sientes con esa persona.

Cuando Shikadai sintio esos pequeños labios pálidos contra los suyos, una oleada de calor se hizo presente en sus mejillas, y su estómago no parecía mas tranquilo.
Era solo una pequeña juntada de labios, un roce, pero cargado de sentimiento. Como le corresponde al primer amor.

No hay nada más bonito que separarse y ver eso ojos azul cielo, lleno de brillos.

—No deberías llorar —Susurro Shikadai juntado ambas frentes.

—Es que esto no está bien.

Shikadai cerro los ojos mientras su garganta también se cerraba.

—La desición es tuya, no quiero ser el que te obligue a nada aquí —Su voz sonaba débil, como si fuera solo un susurro

—¿Sabes cuál es la diferencia del querer y el poder?

—Una son las ganas y el otro las responsabilidades —Nara dio una pequeña sonrisa triste. Se separó un poco para ver los grandes ojos del chico, le pasó la mano por la cara limpiando sus pequeñas lágrimas —Quiza en otra vida puedas estar a mi lado o yo esté al tuyo

El rubio agarro la mano del chico, entrelazandola con la suya. La puso en su mejilla y sonrio.

—Quiza no en este momento, quizá no en esta vida pero te juro que en algún momento estaremos juntos.

Antes de si quiera decir otra palabra, ambos se desmayaron.

No hay acto más puro que el amor.

Los ojos de Inojin ardían, le molestaba la luz también, un rayo de luz era lo único que veía. Le dolía el cuerpo, sus muñecas y tobillos se sentían pesados. Despertó completamente cuando se dio cuenta que estaba atado, se asustó.

Miro a sus lado intentando buscar una pista, algo del por qué estaba ahí. Se asustó. ¿Donde estaba Shikadai?

Cuando sus ojos por fin se acostumbraron a la poca luz, vio la otra esquina, su humano está ahí; de la misma forma en la que él se encontraba. Amarrado y desmayado.
Intento ir hacia donde estaba pero una voz lo detuvo.

—¿Qué es lo que intentas hacer, cupido? Tú creas el amor, pero no lo sientes.

Se quedó congelado, sabía que iba a ser castigado por su pecado pero...

—Pero él no tiene la culpa —Tenia ganas de llorar —él no tiene la culpa de nada —Incluso había elevado la voz para responder.