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Mi nombre es Kurosubo ____ y a partir de hoy asistiré a una preparatoria de chicas. Tengo 15 años y crecí en el orfanato Suzukaze. Durante mis 3 años de secundaria participé del club de voley femenino, por lo que no hice muchas amistades en aquel entonces. Pero ahora es diferente. Iré a una escuela llena de chicas, de manera que es imposible no hacer amigas allá. O eso espero...

Ahora mismo me encuentro caminando hacia la ceremonia de ingreso, pensando en como debería presentarme correctamente... Hasta que alguien chocó mi hombro.

¡WAAH! —La persona con la que me había golpeado, salió disparado hacia el suelo de forma brusca.— ¡QUE DOLOR! ¡ME DUELEEE!

Disculpa ¡¿Te encuentras bien...?! — ¿Qué hago? ¿Realmente fue un golpe tan fuerte?

Oh, ¿Qué ha sucedido? — De repente un auto que estaba pasando se detiene en frente de nosotros. Un tipo alto, bien vestido baja de este y se dirige a nosotros preocupado.— Yo soy medico... —Suspiré aliviada, quizás podría ayudarnos.— Es... eso es... ¡Una fractura! —¡¿Queeé?!

¡Démonos prisa, tenemos que llevarlo al hospital...!-

¡NO! —La voz del chico me interrumpió, volteé a verlo nuevamente.— ¡Debo ir a la ceremonia de ingreso de la escuela ahora mismo! —No podía ver su rostro, estaba mirando al suelo, se lo veía muy frustrado... No pude evitar sentirme culpable...

No te preocupes por eso, el reglamento dice que... ¡UWAAH! —Tomó mi muñeca jalándome bruscamente hacia él.

Imposible...

¡¿SU ROSTRO ES... IDÉNTICO AL MÍO?!

¡¿POR QUÉ TÚ...?!-

¡Eso no importa ahora! —Sus manos tomaron mis hombros y me zarandearon momentáneamente.— ¡Debes presentarte en la ceremonia de ingreso en mi lugar! ¡Solo por hoy! —Su rostro realmente expresaba desesperación, yo aún no sabía que pensar...— Toma, usa esto. Es mi uniforme. —¿Que..?— ¡Ah! mi nombre es Yoichi Nishida, ¿De acuerdo? —De pronto su rostro dejó de verse tan desanimado... De hecho, parecía algo aliviado...

¡Vamos, sube al auto! —El hombre de antes ya estaba dentro del auto, esperándonos. Siendo empujada por Yoichi, subí rápidamente al auto mientras me colocaba la chaqueta de su uniforme.

¡Esto no puede ser cierto...!- —Intenté negarme de alguna manera, pero fui interrumpida por Yoichi nuevamente.

¡Ahhh...! ¡Me duele tanto! —Inesperadamente dio vuelta medio rostro, con una mirada realmente aterradora, sonriendo de manera cínica.— ¿Acaso quieres que sea expulsado por tu culpa...? —Simplemente guardé silencio, escuchando cada una de las indicaciones que Yoichi me daba.

¿Cómo es que terminé en esta situación...?

El auto se estacionó frente al edificio escolar. Supongo que aquí es...

¿Torino? No... Karasuno. —Tienen kanjis muy similares... Suspiré de forma pesada mientras bajaba del auto. Miré atrás fijando mis ojos en Yoichi.

¡No te olvides de inscribirte en el club de voley! ¡Suerte! —El auto rápidamente desapareció de mi vista. Llenándome de valor, inflé el pecho y expulsé el aire de golpe. Es hora, pensé. Avancé dentro del instituto con el cuerpo inundado en nervios. ¿Y si alguien me descubre? Es cierto que Yoichi tiene un parecido enorme conmigo, pero eso no quita el hecho de que puedan descubrirme de igual modo...

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Todo ha salido de acuerdo al plan, joven Yoichi.—Dentro del auto, Yoichi se encontraba recostado en su asiento mientras sonreía triunfante.

LETS FLY || Haikyuu y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora