09

2.8K 282 103
                                    

Todos sabían que había comenzado mi periodo al verme llegar con un claro mal humor. Aunque esos días no quería hacer otra cosa que dormir, me obligaba a entrenar, sorprendentemente me ayudaba para mis dolores pero no para mis cambios de humor.

-¿Por que me tiene que bajar un lunes? - pregunté a la nada una vez estaba cerca de Jisung y a Changbin.

-Oh no, aléjate de nosotros. Ve con Seungmin y Chris que te tienen más paciencia - comenzó Jisung en forma de queja.

-Si tu estado normal ya es agresivo, no queremos estar a tu lado así - agregó Changbin y tuve que respirar profundo para no golpearlo.

-Idiotas - comencé pero Minho, que estaba haciendo unas dominadas y tomó mi brazo para alejarme de ellos.

Me acercó a un saco de boxeo para que descargue energía y fuerzas mientras me preguntaba cómo me sentía. Me corrigió algunas veces las poses y, al no ser un experto, le preguntó algo sobre mi forma de golpear a Chris.

No habíamos vuelto a hablar después de nuestra pequeña discusión por Hyunjin y Chris, casi sin dirigirme la mirada, me corrigió con una indicación y se fue al otro extremo del gimnasio.

-¿Pasa algo entre ustedes dos? Es la segunda vez en poco tiempo en que están distanciados - notó el mayor mientras tenía la bolsa para que no se moviera para todos lados por los golpes.

Y tenía razón, no solíamos pelear y era raro estar distanciados.



Ya estaba llegando a mi casa arrastrando mis pies y con una mano sobre mi vientre tratando de controlar el dolor cuando vi a Chris esperándome donde siempre.

-¿Es normal que duela tanto? - preguntó alcanzándome un pequeño chocolate que tenía en la mano.

-Sí y gracias, eres el mejor - le sonreí y noté que se movía algo incómodo-. ¿Quieres pasar?

-Oh no, debería volver. Solo quería darte eso - habló-. Soojin... perdón por lo del otro día. Tienes razón y no debería molestarte tanto...

-No, estuve mal yo. Perdón - lo interrumpí-. Fui muy orgullosa.

Chris me sonrió, cerrando ligeramente sus ojos y mostrando sus pequeños hoyuelos. Me rodeó con sus fuertes brazos y me abrazó.

-Mierda - susurré y Chris se alejó preocupado-. Me olvidé de comprar toallitas higiénicas.

-Entra, iré a comprar y te las traigo - me dio palmaditas en la espalda para animarme a entrar a mi casa-. ¿Las de siempre?

-Sí. Gracias - le sonreí y entré a mi casa, no sin antes darle un beso en su mejilla.



-Otra vez tú - suspiré.

Había ido al café que había ido con Soyeon y Miyeon el otro día para saciar mis antojos de dulce, aprovechando que ese día entraba tarde a mi entrenamiento. Me había pedido una porción de torta y un latte y me había sentado para poder saborear mi pedido.

-También me gusta el café de aquí - se excusó y se sentó a mi lado-. ¿Me das un poco? - preguntó señalando mi torta de chocolate.

-Cómprate uno, es mío - contesté cortante.

-Podría robar uno - al ver enojo en mi expresión levantó las manos en señal de rendición-. Era broma. Hablando de robo, traumaste a mi amigo.

-No debería ir por ahí robando - comenté dando un mordisco-. Si un ''trauma'' consigue que no lo haga más, me deja tranquila.

-Era una apuesta, aunque agradezco que haya pasado - suspiró dramáticamente. Sabía que quería que le preguntara el porqué pero al ver que seguía comiendo en silencio, ignorándolo, siguió-. Gracias a eso te conocí.

-Wow, que piropo. Lo voy a anotar - dije sarcásticamente.

-¿Ese rubio es tu novio? - curioseó dándole un sorbo a su café.

-No es de tu incumbencia.

-¿Eso es un no? - sonrió ligeramente, mostrando apenas sus dientes.

-¿Que quieres? - solté.

-Que brusca - rió-. Seré directo. Me gustas y quiero tener sexo contigo.

Casi me ahogé con el café. Aunque supuse que era algo así, no esperaba tan poco tacto para decirlo. Hyunjin soltó una pequeña risa por mi sorpresa.

-¿Muy directo?

-No quiero tener nada contigo - expliqué-. Ahora déjame estar sola.

-¿Estás segura que no tengo ninguna oportunidad? - insistió colocando una mano sobre la mía. Sus manos tenían los dedos largos y delgados y era mucho más grande y cálida que la mía. Aunque por un lado la quería dejar ahí, la aparté rápidamente.

-Segura. Ahora, o te vas o yo me voy - insistí y suspiró.

-Me iré yo. Disfruta esa torta por mí - habló antes de irse de allí.

boxer » bang chanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora