boxer » bang chan

13

Estábamos caminando ya de vuelta a nuestras casas. Solo estábamos a un par de cuadras de la mía cuando Chris habló.

-Sabes que no me gustan las mentiras, ¿cierto? - comenzó y sabía a qué se refería.

Desde ese día que había ayudado a Hyunjin no habíamos hablado. Fuimos a correr el domingo, nos vimos en el gimnasio pero todo sin dirigirnos la palabra. Sabía que no me había creído esa vez que le dije que iba a ir a la casa de Soyeon, era obvio que había ido detrás de Hyunjin cuando solo habían pasado unos minutos luego de haber sido echado del lugar.

Odiaba ser orgullosa, odiaba no poder admitir que me equivoqué antes de que las cosas se alargaran demasiado. Y odiaba también que Chris me tenga tanta paciencia para aguantar mis silencios orgullosos

-No me fui con Soyeon ese día, perdón - solté luego de un silencio. Ya estábamos cerca de la puerta de mi casa, pero me detuve a unos metros. No quería llegar aún-. No sabía como decirte la verdad.

-¿Entonces fuiste con ese chico? - preguntó mirándome fijamente. Al ver que asentía, siguió-. Prefiero que me cuentes la verdad y que me digas que vas a ir con... ese, a que me ocultes las cosas. ¿Y si algo te pasa? - preguntó.

Estaba dolido, cualquier persona lo sabría por su expresión. Me sentí completamente culpable y tomé sus enormes manos entre las mías, pero no hablé.

-Desde que apareció ese chico estás diferente. Nunca me has ocultado nada, ¿por qué ahora sí?

-Perdón - insistí sin saber que decir-. Yo...

-Esta es la razón por la que tuve insomnio además de lo de mi familia. Ya estoy mejor, en casa todo se calmo, pero me alegra poder decirte las cosas - eso último lo dijo más para sí mismo que para mí.

Hundí mi rostro en su pecho y rodeó mi cuerpo con sus brazos. Susurré varias veces "perdón" y él no me dejó de abrazar hasta que pasó unos largos minutos. Acarició mi oscuro cabello y me acompañó hasta mi casa, animándome a entrar.

-Alguien vino a verte - dijo mi madre apenas entré y le expliqué que había salido con mis amigos.

-¿Te dijo su nombre? - pregunté mientras caminaba a la cocina para tomar agua.

-Sí, pero no me lo acuerdo - rió débilmente por su pequeño olvido-. Pero era un lindo chico. Cabello oscuro y algo largo, alto y...

-¿Tenía un corte en el pómulo? - pregunté volteando a verla totalmente seria y asustada. No podía haber sabido dónde vivía, nunca se lo había mencionado.

-Mh, sí. En el momento no me llamó la atención pero ahora que lo mencionas, sí.

-¿Se llama Hyunjin? - mamá entendió que algo iba mal por como mi rostro se había transformado.

-Sí, ese era el nombre... ¿Soojin? ¿Está todo bien?

Hijo de puta. Me había seguido y había descubierto dónde vivía. Verla a mi madre, tan pequeña, aún demasiado flaca y débil junto a alguien que no sabía de lo que era capaz me hizo sentir enojo.

-Ma, si es él, no le abras la puerta - le advertí-. Y no te preocupes, yo me encargaré.