𝐥𝐢𝐧𝐞𝐚 𝐛 - 𝐰𝐨𝐬

diez.

Hola Marian, ¿todo bien? Yo ansioso. Hoy Ernestina me va a presentar a su nieta. Yo le dije que no porque me daba mucha ansiedad, pero se puso insistente y se notaba la emoción en su cara. A veces me hace acordar un poco a mi abuela, así que por eso accedí.

"¿Así que hoy salís, titán?" me molesta Tadeo mientras se atragantaba con el guiso. "Arriba hijo 'e tigre."

"Callate, ni me lo recuerdes..." me tapo la cara con vergüenza.

"¿Con quién salís?" pregunta Manu desorientado. "¿Por qué siempre me pierdo de todo?"

"Porque nunca estás..." contestamos Tadeo y yo al unísono. "Sale con la nieta de la vecina, un ganador."

"¿Valentín Oliva?" pregunta con sorpresa fingida. "¿Saliendo con una fémina?" El Depa se ríe por lo bajo. "Mis respetos."

"¿Es linda?" cuestiona curioso mi amigo.

"No la conozco..." me encojo de hombros. "Es solo una tarde, yo puedo." digo sin convicción.

"Cita a ciegas dirían los yankis..." me empuja levemente Manuel. "Dale campeón." ríe.

Terminamos de comer y salgo disparado a lo de Ernestina. Me recibe con un budín de naranja y mates amargos, tal como me gustan.

Tocan timbre. Es la famosa Ali. Era bastante alta, tenía pelo corto y de color rubio. No se la nota con muchas ganas de estar en ese lugar, y no la culpo.

"Tenés que acompañar a Valen a buscarme unas cosas al bajo..." acota pícara Ernestina. Ah, Ali ni siquiera sabía que íbamos a salir. "Y si quieren ir a dar unas vueltas por ahí no me molesta."

Era amable y de poca parla, aunque todavía no deduzco si habla poco porque no quiere estar acá o si es medio tímida como yo. No indaga mucho en cuestiones personales, entabla conversaciones bastante superficiales a pesar de mis respuestas monosilábicas de voz temblorosa.

"Debes pensar que me quiero ir..." asiento con una tímida sonrisa mientras tomo lugar en el vagón del subte. "En realidad no es eso, a mí me caes bien y pareces buen chico." me estaba intentando rechazar con suavidad, que amable. "Pero no sos mi tipo."

"Yo acepté porque la quiero a tu abuela..." confieso y a su vez me sorprendo por la capacidad de hilar una frase de corrido y coherente. "Pero a mí también me caes bien y pareces buena chica."

Malabia. Sube Lucero - muy cambiada, por cierto - y me dedica una sonrisa muy dulce en la lejanía del espacio. Ahora me estaba poniendo nervioso, la puta madre. 

"Saludala a tu novia, no pasa nada..." me empuja levemente el hombro Ali.

"No es mi novia." respondo tajante. Ojalá, pienso.

"Uh, bueno, me equivoqué..." ríe dulce. "Igual le interesas, mirá como te mira." señala con disimulo.

"No sabes eso." respondo con el ceño fruncido. 

"Intuición y obviedad. Nadie va y mira así a la gente por la vida." se encoge de hombros.

Yo pienso. Me gusta pensar cuando está cerca, le ofrece cierta claridad a mi cabeza a pesar del huracán que suele manejar. Suena raro, suena torpe y también suena demencial, pero hay cosas que simplemente suceden con una naturalidad inenarrable, y esta es una de esas.

"¿Pero no se hablan?" pregunta curiosa. Niego con la cabeza pero sin sacar los ojos de Lucero. "¿En serio?" asiento. "¿Y qué esperas?"

"A permitirmelo." volteo a verla con sinceridad.

🥀🥀🥀

Vamo Valen tas progresando amigo vos podés.

Ya se termina chikis le queda poquitísimo.