˗ˏˋ 𝙋𝙪𝙧𝙚, 𝙙𝙖𝙩𝙚 𝙘𝙪𝙚𝙣𝙩𝙖┆𝘙𝘶𝘴𝘝𝘦𝘯𝘦 ˊ˗̖

•OO7•

—Venezuela, levantate—ordenó Rusia moviendo ligeramente el cuerpo de su novio.

Cuando el tricolor abrió los ojos sintió un dolor de cabeza insoportable, como si un pequeño alien tratara de salir de allí.

—No, yo aquí me voy a quedar.

Respondió el menor colocando sus manos en su pecho.

—Yo aquí me voy a morir—declaró el veneco.

—Deja de bromear, Venezuela, el avión sale en una hora—regaño el eslavo.

—No lo digo enserio, me siento mal, llevame a un hospital—dijo el venezolano al borde de las lagrimas—, me duele todo.

En ese momento Rusia se preocupó por su novio así que salió a buscar a cualquiera que pudiera ayudarle, al final regreso con México.

—A ver, wey ¿que tan grave es? ¿que te duele?

—Todo(!—respondió el veneco—, no hay una uña que no me duela. Estoy temblando de frío, pero estoy sudando de la cara, se me jodio el termostato, hubo un fallo en la matrix.

—Wey, estas crudo—dijo Mexico—, es resaca.

—Ay pues eso ya lo se, pajuo—insulto el venezono.

—¿Tienes algo para que se le pase?

—No, no existe un remedio para la resaca—respondió México—, espera a que se le pase. O tomate un cerveza.

Rusia miro desconcertado al mexicano.

—Mexico creo que tienes una idea equivocada de–

—Obviamente no se va a tomar la misma cantidad de ayer—aclaró México al euroasiático—tomate una o dos—dijo a Venezuela.

El tricolor, descarto la idea casi inmediatamente, estaba loco si, pero no lo suficiente para comprometer su integridad física de esa forma.

Venezuela ni corto ni perezoso se levantó de la cama, no era ni su primera ni su última resaca y esta no lo iba a tumbar ni mucho menos. Pero en cuanto puso un pie en el suelo el ambiente se distorsiono y cayó al piso cual saco de cemento.

—Vene, lindo, no hagas eso te puedes lastimar.

Al final Rusia tuvo que cargar a Venezuela hasta el avión y llevarlo en sus piernas durante todo el viaje, por capricho del venezolano.