Vida De Mentiras (CONCLUIDA)

21- Otra Vez No (2)

Mi gran error fue acostumbrarme a ti, cuando no pretendías quedarte.

—Valentina Carvajal

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—buenos días, chiquita. Pensé que ibas a dormir hasta mas tarde— le dijo Val, desde el otro lado de la línea

—buenos días, morrita. Yo también lo pensé... Val, ¿puedes venir directo a mi casa cuando salgas de la oficina?

—por supuesto, chiquita

—gracias

—¿todo bien, amor?— preguntó Val, un poco preocupada

—si morrita mía, todo está bien. Es que... Te necesito Valentina. Quiero estar contigo, hoy más que nunca te necesito a mi lado— le dijo Juliana, con su voz ahogada y sin poder evitar las lágrimas

—¿estás llorando, mi amor? Por favor dime que es lo que tienes, Juliana. Me estoy preocupado

—nada, morrita. Hoy amanecí muy sentimental. Sintiendo demasiado amor y deseo, por ti— le dijo Juliana mientras se limpiaba las lágrimas— te amo con mi vida, y arriesgaría todo por ti...— Juliana volvió a llorar

—Juliana. No sé que es lo que tienes, pero sé que no estás bien. Terminaré algo aquí, y luego salgo para allá— le dijo Valentina, antes de colgarle.

Juliana salió de su habitación y bajó rápidamente hacia el primer piso.

—buenos días— saludó desde la puerta de la cocina, a las dos mujeres que desayunaban.

—buenos días—  dijeron las dos al mismo tiempo.

—te prepararé un café, hija. No pensé que despertarías tan temprano— le dijo Carmen, poniéndose de pie

—antes quiero hablar contigo. ¿Vienes?— le dijo Juliana, para luego caminar hacia la sala. Carmen la siguió

—dime, mijita— Carmen se acercó a ella

—necesito que Lupe y tú, pasen todo el día en tu casa. Hoy tengo que estar sola

—¿te sientes bien, hijita?— su tía le acariciaba el brazo. Juliana suspiró

—luego te cuento. Ahora terminen de desayunar y, luego... Ya sabes— le dijo Juliana. La mujer asintió

—te prepararé el café— dijo la mujer, antes de volver a la cocina.

El celular de Juliana sonaba. Puso cara de fastidio al ver el contacto...

—¿qué quieres, Jacobo?— contestó de mala manera

—hoy por la noche sale tu vuelo...

—te dije que no me iré a ningún lado

—¿piensas arriesgar las vidas de las personas que te rodean?... Juliana esto es serio. Me enviaron una amenaza anónima, para que te sacaran del país antes del día de mañana, o sino te asesinaran... A Valentina también— le dijo Jacobo. A Juliana le empezó a later el corazón, al escuchar el nombre de Valentina

—me iré con Valentina. La llevaré conmigo...

—no puedes hacer eso. Fue la primera orden que me dieron... Tienes que salir sin Valentina

—ahora recibes ordenes de delincuentes... ¡Jacobo eres la autoridad! ¿Cómo puedes dejarte manipular así?...

—no soy la autoridad en de ese país... Te voy a hablar como un hermano que te ama y, que no te quiere perder— le dijo Jacobo con su voz ahogada— tienes que salir de ahí, hoy por la noche. De no ser así, Valentina será asesinada delante de ti...