le bébé mafieux (Chanhun)

El comiezo

Sehun llegó media hora antes a la cafetería, por que hoy su jefe en el club nocturno le pidió entrar un poco antes debido a que llegaría un cliente "importante" y quería todos los empleados ocuparan su lugar cuando su cliente llegará para quedar bien con él.

Entró al café con su característica sonrisa que todos los empleados conocían y amaban. Sus compañeros lo trataban como a un bebé y le apodaban bebéHun porque aún era un niño delante de los demás.

—¡Buenos días!— Gritó en la cocina al ver a Minseok, un cocinero atractivo que siempre le preparaba comida y lo consentía.

Se colocó su mandil de trabajo, se puso su placa con su nombre y tomó su libreta para las órdenes.

—BebéHun, llegaste temprano— Habló mientras preparaba un capuchino— Eso es bueno, pero necesito que tomes el pedido de la mesa 3, los demás meseros aún no han llegado.

Sehun solo asintió y fue directo a donde Minseok le dijo.

—¿Puedo tomar su pedido?— Preguntó con amabilidad aún sin ver al cliente.

—Puedes tomar todo lo que quieras de mí— Una voz ronca le respondió ruborizándose ante el comentario— Pero como sé que no será posible, quiero un mocaccino y una hojaldra con mucha leche.

Sehun anotó con nerviosismo sin siquiera mirar al moreno y huyó de ahí.

Kai rió al ver la reacción de ese pastelito de frambuesa andante, algo que sabía es que quería una noche caliente con él y no descansaría hasta tenerlo gimiendo bajó él, pues se cargaba un hermoso cuerpo característico de un twink.

Minseok observó llegar a Sehun rojo como un tomate lo cual lo preocupó.

—BebéHun ¿El cliente te dijo algo malo?— Sehun negó y solo le entregó la nota del pedido para que Minseok se lo sirviera.

Sehun nunca había recibido un halago así, por eso se encontraba así de nervioso, Minseok se encargaba de ahuyentar a los clientes que querían coquetear con él, siempre con la excusa de que aún era un niño, su niño.

—Listo, llévalo al cliente— Sehun asintió y tomó la bandeja con el pedido, respiró y se dirigió a la mesa del moreno.

—Aquí tiene— Susurró colocando el mocaccino y la hojaldra frente al moreno— Buen provecho.

Iba a huir cuando la mano del moreno se lo impidió sujetándolo sin fuerza por la muñeca.

—¿A qué hora sales por el pan, bombón?— Le susurró el moreno llenándolo de su fragancia masculina.

—Yo no me encargo de surtir el pan, pero Jackson si, creo que como a las 6 de la mañana lo va a buscar— Habló Sehun haciendo que el moreno se carcajeaba, cosa que lo indignó.

—Es broma, pastelito de frambuesa, eres demasiado inocente— Susurró Kai, cosa que le fascinó.

—No me llamo pastelito de frambuesa, mi nombre es Sehun— Dijo cabreado antes de irse a tomar el pedido de otra mesa.

JongIn se impresionó al ver el carácter del otro, ese pequeño twink necesitaba a alguien que le enseñará a respetar y se encargaría de ser solo él. Había encontrado a su esposa perfecta y vaya que lo disfrutaría.

La llamada de su celular interrumpió su contemplación al hermoso pastelito llamado Sehun.

—¿Choi?— Contestó.

—No, pendejo, tu mamá— Sonó al otro lado de la línea.

—La tuya será— Respondió de mala gana— ¿Qué quieres? No ves que estoy en una misión importante.