le bébé mafieux (Chanhun)

Sorpresa

Kai guio a Sehun hasta el estacionamiento.

—Te presento a mi bebé— JongIn lo condujo hasta su Harley Davidson— Su nombre es Thelma y es mi mayor adoración.

—¿Es broma?— Dijo Sehun al ver la motocicleta— No me subiré a esa cosa.

—Entonces lo haré yo— Sehun chilló al ser cargado por ese par de brazos fuertes, pero le dio un codazo en el estómago al sentir una mano tocando su trasero aún cuando ya estaba arriba, Kai se quejó y le dio el casco e inmediatamente lo usó— Agárrate, que no querrás rasparte ese hermoso culito.

—Pervertido— Le susurró Sehun al momento de agarrarlo por la cintura, Kai arrancó de pronto causando que su pastelito de frambuesa se apegara más a él, cosa que no le molestó para nada al moreno— ¿A dónde iremos a cenar?.

—Estas muy provocativo para andar en la calle, siempre he querido saber donde vives ¿Cenamos en tú casa?— Gritó Kai debido a la rapidez con la que manejaba.

—Me parece bien— Sehun le gritó al oído- Yo te guío.

Con las instrucciones de Sehun llegaron en diez minutos a su departamento.

Hun bajó primero para abrir el portón del estacionamiento.

Kai observó todo el lugar y a pesar de que era una mierda no comentó nada para no ofender a su pastelito.

—Sí, JongIn, ya te lo he dicho más de 10 veces: el estacionamiento es seguro para dejar a Belma— Dijo ya fastidiado Sehun.

—Es Thelma y si tu lo dices, dejaré a mi bebé aquí, pero si le pasa algo no dudaré en moler éste lugar para construir un estacionamiento privado para mis vehículos y tú tendrás que vivir conmigo— Propuso JongIn y Sehun se hizo el tonto con lo último.

—Subamos— Lo guio Sehun a las escaleras.

—¿Y el elevador?— JongIn arqueó una ceja al ver la infinidad de escaleras del lugar.

—Tiene tres años sin funcionar— Dijo apenado Sehun— Mira, JongIn, si quieres me subo a cambiar la ropa y cenamos afuera.

Kai negó y se adelantó a subir la infinidad de escalones. Su cuerpo estaba entrenado para soportar una infinidad de cosas y esas escaleras no eran nada para él.

Subieron escaleras por casi 10 minutos hasta que se detuvieron en la puerta del departamento de Sehun. La puerta tenía el número 24 en una placa oxidada colgando en ella.

—Sé que no son los lujos a los que estas acostumbrados, pero tengo ramen instantáneo— Sehun le dio una sonrisa antes de guiarlo al sillón en medio de la pequeña sala.

—Todo lo que me des lo recibiré con gusto, pastelito de frambuesa— Con eso Sehun se puso a preparar la cena de esa noche.

Tuvieron una velada tranquila entre pláticas y risas hasta las 3 de la mañana dónde sorprendentemente Kai le rogó a Sehun por dejarlo dormir en su casa, éste aceptó un poco desconcertado, pues era la primera vez que alguien se quedaba a dormir en su apartamento desde que se había mudado ahí.

Salió del baño dispuesto a buscar unas cobijas para dormir en el sillón, pero se topó con la sorpresa de que Kai lo estaba esperando en la cama en ropa interior con la excusa de que hoy hacía mucho frío y debían de dormir juntos en ropa interior para generar calor corporal, aunque estuvieran a mas de 37° de temperatura.

Sehun se puso unos shorts para dormir y una camisa sin mangas, aunque se la tuvo que quitar por que Kai "por accidente" le tiró leche encima, así que solo se acostó en shorts de algodón.

Esa madrugada Sehun durmió incómodo al sentir a JongIn casi sobre él o el paquete de éste frotándose en su trasero mientras "dormía"

Le dieron las diez de la mañana y el moreno parecía no quererse despertar y Sehun tampoco, pero el sonido de la puerta lo hizo pararse de la cama.

JongIn aún dormía con la boca abierta y un poco de saliva escurriendo y bañando la cobija, Sehun se la intentó cerrar, pero la volvía a abrir.

La puerta seguía insistiendo y solo se colocó la camisa de JongIn encima, por fortuna cubriéndole su casi desnudez.

Se iba a dirigir a abrir la puerta cuando alguien se le adelantó en la labor y la cerradura fue derribada de una patada, cosa que despertó de inmediato a JongIn.

Sehun se asustó y corrió a la habitación donde el moreno estaba ya despierto y alerta.

—JongIn, alguien entró al departamento— Susurró Sehun, intentando no hacer ruido.

—Espera aquí, pastelito, iré a ver— Dijo JongIn buscando algo en el bolsillo de su pantalón y maldijo al ver que no traía consigo su arma— Mierda.

Alguien estaba intentando entrar ya a la habitación.

—Oh Sehun, vengo por mi dinero— Dijo una voz ronca al otro lado. Ambos no predijeron que se trataba de Park Chanyeol.

—¿Tienes los 2,000 ahí?— Le preguntó temeroso Sehun a Kai, el cual asintió y de su cartera sacó el cheque ya listo- Gracias.

Chanyeol vio un pequeño papel deslizarse hacia ellos, uno de sus hombres lo revisó y le informó que se trataba de un cheque.

Tenía dos planes en mente: salir del departamento y hacer como que nada paso o tirar la puerta de la habitación y darle una buena paliza al tal Oh Sehun para hacerle entender quién manda, pero, como se trata de Park Chanyeol un mafioso desgraciado optó por la segunda opción. Le dio la orden a sus hombre de derribar la puerta y así lo hicieron.

Chanyeol entró luego de que sus guardias quitaran las astillas de la puerta.

No pudo ni siquiera dar un paso más dentro de la habitación cuando sus ojos se toparon con su deudor.

Esto debía ser un error.

El mesero no se podía tratar del tal Oh Sehun.

Pero para su mala suerte lo era.

Y lo peor es que estaba en ropa interior con el maldito de Kim JongIn, SU maldito enemigo.